Aunque las cifras oficiales de consumo de sustancias psicoactivas en la región dan cuenta de 1.075 consumidores entre 2015 y 2017, las autoridades afirman que el subrregistro es mayor y sin estos datos, las acciones de atención son complejas y muy difíciles.

Según el secretario de Gobierno del departamento, Édgar Pallares, “la realidad del consumo es muy superior a lo que las estadísticas nos muestran, porque es una actividad que se hace en la clandestinidad y es difícil conocer con precisión cuántos adictos hay”.

Por su parte, para el comandante del Departamento de Policía de Norte de Santander (Denor), coronel George Quintero, la situación del consumo “tenía que haber prendido alarmas desde hace tiempo”, en especial porque el departamento ocupa el segundo lugar en cultivos ilícitos en Colombia.

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“Nos genera alerta el tema de consumo de sustancias inyectadas”, afirmó el oficial.

En este sentido, según la secretaría de Salud de Cúcuta, la capital nortesantandereana tiene el más alto número de afectados por esta adicción, con 1.052 casos identificados.

Por ello, entre las actividades para combatir el tráfico y atender a los pacientes, se estableció en el Consejo departamental de estupefacientes focalizar un sector para actuar.

Inicialmente, se propuso evaluar una zona de Cúcuta, y se espera que para diciembre de este año se tenga el plan de acción, para ejecutar el otro año.

“Se busca una acción integral y, en la medida que seamos exitosos para implementar la política de combate del microtráfico y la sensibilización social, podremos llegar a otros municipios”, dijo Pallares.

Consumo y cultivo

Tanto para Quintero como para el secretario de Gobierno, en la región son igualmente graves el consumo y la producción de sustancias psicoactivas.

“El peso mayor lo tiene la demanda y es una de nuestras preocupaciones”, dijo Pallares. “Por eso, la acción debe recaer principalmente en las escuelas y las familias, para desestimular la ofera”.

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Según cifras de las autoridades, en lo corrido del año se han destruido 48 laboratorios de base, 17 de coca y 4 de permanganato, en Sardinata. Teorama, Tibú, El Tarra, Ocaña, Durania, Convención y Ábrego.

“Esperamos unificar las cifras y actualizar el diagnóstico existente”, agregó Quintero. “Aún así, se requiere más acompañamiento de la institucionalidad y de las familias; que conozcan el tipo de drogas que circulan en la región, los síntomas y nos ayuden a actuar oportunamente para luchar contra los estupefacientes”.

Otros datos

Según un informe presentado en el más reciente Consejo departamental de estupefacientes, Cúcuta y El Zulia figuran como municipios emergentes en cultivo de coca.

Como parte de los logros en el control de sustancias químicas para fabricación de drogas ilícitas, las autoridades reportaron la incautación de 700 kilos de ácido sulfúrico.

En materia de incautación de estupefacientes, el primer lugar lo ocupa Tibú, seguido por Cúcuta, Sardinata, Los Patios, y Ocaña.

Según el Estudio Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas (2013) la edad promedio de inicio de consumo de marihuana en el departamento es de 18 años, y 19, de cocaína.

La secretaría de Salud de Cúcuta invertirá 230 millones de pesos para la entrega de elementos sanitarios para que los heroinómanos no reutilicen ni compartan jeringas contaminadas, ya que al menos el 26 por ciento de ellos efectúan estas riesgosas prácticas.