En 15 municipios de Norte de Santander no se registraron homicidios en los primeros seis meses de este año. Uno de los casos más significativos es Convención, en donde hubo una histórica reducción del 100% en la tasa de asesinatos.

Las cifras reveladas por el Departamento de Policía de Norte de Santander (Denor) indican que en 2016 hubo siete muertes violentas en esa jurisdicción. La institución destacó que Arboledas también presentó cero homicidios en el primer semestre.

De acuerdo con la Denor, los otros municipios en donde no ocurrieron hechos sangrientos que enlutaron familias son Cácota, San Calixto, La Esperanza, Cucutilla, Toledo, Bochalema, Chitagá, Cáchira, Durania, Gramalote, Labateca, Lourdes y Pamplonita.

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Otro escenario resaltante es el de Sardinata, en donde los casos de homicidios pasaron de 11 a ocho, en comparación con los primeros seis meses del año pasado, así como el de Teorama, cuya cifra  bajó de 16 a cinco. Ábrego igualmente está en este grupo, pues las muertes violentas se redujeron de cinco a una.

La autoridad destacó que estos resultados se deben a “las constantes actividades de prevención y educación ciudadana y planes operativos de impacto, desarrollados bajo una metodología de priorización de puntos críticos y focalización del actuar delictivo, aunado a las prácticas preventivas que se han puesto en marcha con el nuevo Código de Policía”.

“La metodología ‘Hot Points’ o puntos críticos permite focalizar hechos delictivos, para que a partir de un estudio estadístico y de comportamiento social se prevean acciones operacionales destinadas a efectuar la reducción de delitos, que para este caso priorizó algunos lugares abiertos al público”, agregó la Denor.

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La Policía enfatizó que los factores que han influido en el comportamiento positivo de este índice están directamente relacionados con los planes de judicialización de sindicados de homicidio y de porte de armas.

Finalmente, la Denor recalcó que incrementará las actividades operativas y de control e invitó a la ciudadanía a ser más tolerantes y a evitar reacciones violentas, que son los detonantes de riñas que terminan en hechos fatales.