Es martes y un vehículo de transporte de abarrotes se dirige a las torres de Cormoranes para dejar los pedidos. Como la calle 14, por donde habitualmente pasa, está cerrada por unas obras de reposición de alcantarillado, toma un atajo por la calle 15.

Al llegar a la calle de al lado el conductor queda atrapado. Los vecinos quitaron las rejillas de un canal de lluvias para impedir el paso vehicular. Una angosta tabla en la mitad del canal permite que motociclistas y ciclistas entren y salgan sin ninguna dificultad.

“Quitamos las rejillas, porque no queremos que los carros nos dañen la calle como lo hicieron con la 14. Nosotros pavimentamos esta vía y nos duele que otros la acaben”, explica uno de los vecinos.

El conductor del camión y la fila de carros que se dirigen al barrio deben dar la vuelta y buscar una nueva ruta que los lleve a las torres.

“Baje por la 4 de Motilones, coge La Florida y pasa por Caracoles hasta llegar a las torres”, es la solución que da uno de los vecinos de la calle 15 a los conductores. “Si le queda mejor métase por la 30 de La Ermita”

Los más ofuscados con la medida son los residentes de Cormoranes. Con el cierre de la entrada principal de El Paraíso la ruta de busetas no llega hasta las torres como antes.

“Entendemos las razones de los habitantes de El Paraíso, pero ellos también deben pensar en los que vivimos más abajo. No nos parece justo”, dijo Marisol Reyes, una de las afectadas.

Los cierres viales no son nuevos en El Paraíso. Un mes atrás, los vecinos de la calle 14 cerraron la vía principal exigiéndole al municipio la pavimentación de su vía. En ese entonces alegaron que las máquinas que entraban y salían durante la construcción de las torres de Cormoranes le dañaron su vía de acceso.

Por su parte, la Alcaldía adelanta la construcción de la carretera que unirá a Cormoranes con el Anillo Vial Occidental.