Una cámara de seguridad dejó en evidencia cómo una pareja de motorizados persiguió la camioneta del venezolano Rigoberto José Urdaneta Romero durante el recorrido que hizo desde la Avenida Cero hasta la Diagonal Santander, donde finalmente el parrillero le disparó, sin bajarse de la moto.

En las imágenes se observa a la motocicleta, al parecer, Kawasaki KLR 650 (negra) detrás de la camioneta Toyota Fortuner venezolana, de placas AE409SD, en la que se movilizaba la víctima junto a Carmen Urdaneta, su esposa y una de las hijas, que resultó ilesa del ataque.

Todo indica que el delincuente  disparó en al menos once oportunidades hacia la ventana del conductor, con el objetivo de acabar con la vida del empresario del aceite de palma.

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“‘Tirotiaron’ a papi, se va a morir (...) por favor señor, ayúdelo, se lo pido”, esas fueron las súplicas de la hija de Urdaneta Romero, en los segundos posteriores al ataque indiscriminado a balazos que se registró sobre las 6:30 de la noche del miércoles, en esta concurrida avenida.

El recorrido

Según se conoció, Urdaneta estuvo concretando un negocio en un concesionario de carros de alta gama ubicado en la avenida cero entre calles 13 y 14.

Cuando salió del establecimiento comercial con su familia, tomó la Avenida Cero y cruzó por la calle 11, llegando hasta el centro comercial Ventura Plaza, para tomar dirección de la avenida Diagonal Santander con rumbo a su casa, en el condominio Mirador Campestre.

Ocurrido el hecho, el tráfico se paralizó durante varios minutos, mientras los paramédicos de una ambulancia auxiliaban a Urdaneta para trasladarlo a la clínica Santa Ana, donde finalmente murió.

La esposa de la víctima, que recibió un impacto en la pierna, también fue atendida en el centro médico.

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Hipótesis

El coronel José Luis Palomino López, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que adelantan rigurosas investigaciones para esclarecer el homicidio del empresario venezolano que desde hace un año y medio vivía en la capital de Norte de Santander.

El oficial dijo que Urdaneta migró del vecino país por las múltiples extorsiones de las que era víctima, que afectaban su economía y su integridad.

Asimismo, Palomino dijo que entre las hipótesis que las autoridades están analizando sobre el crimen están un posible ajuste de cuentas, las extorsiones o la probable reclamación de un seguro. 

“Es nuestro propósito indagar sobre este hecho”, dijo el oficial.

Productor de aceite

Un familiar de Urdaneta, que ayer adelantaba los trámites para reclamar el cadáver de su ser querido, aseguró que él era el mayor productor de aceite de palma en Venezuela actualmente. 

“Las empresas del estado no están funcionando, entonces él tenía el control de la producción del aceite en el país”, dijo.

Asimismo, desconocía de amenazas o problemas en su contra. “Si hubiera tenido problemas tendría que movilizarse en una camioneta blindada y él no tenía seguridad”, explicó.

Al parecer, Urdaneta vivió un tiempo también en Estados Unidos, aunque no se tuvieron mayores detalles.