En menos de veinte días, la disputa a sangre y fuego que mantienen los grupos armados ilegales en el corregimiento San Faustino, que limita con Venezuela, ha dejado a un hombre muerto y a una pareja de hermanos herida.

El más reciente caso ocurrió en la mañana de este sábado en el barrio El Cerrito, y en él resultaron heridos Marino Antonio Vázquez Olivares, de 50 años, y su hermana Tania Yazmín, de 41; ambos fueron atacados cuando pretendían cruzar el río hacia territorio venezolano, junto a ocho personas más.

Según se conoció, hacia las 6:15 de la mañana, cuando las diez personas aún estaban en suelo colombiano e intentaban pasar el río para ir a trabajar en Ureña (estado Táchira), un grupo de hombres con armas largas y vestidos con buzos de color azul claro y gorras, les disparó de manera indiscriminada desde el otro lado de la orilla.

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En medio del ataque, a Marino Antonio le rozó un disparo en el pecho, por lo que de inmediato se regresó corriendo para su casa que está ubicada a 200 metros y tomó un taxi que lo trasladó al hospital Erasmo Meoz.

Su hermana Tania Yazmín, luego de embarcar a su familiar en el vehículo de servicio público, se devolvió al lugar donde los habían atacado para recuperar el celular y los documentos de su hermano, pero nuevamente los agresores dispararon, impactándola en un brazo y en el pecho, por lo que también tuvo que ser trasladada al hospital.

Sin embargo, la tensión y los momentos de angustia no pararon para los vecinos del sector. Los disparos sonaban constantemente desde el territorio del vecino país.

“Se han escuchado disparos durante cuatro horas; eso siempre es así y nosotros tenemos que escondernos en las casas, porque nos da miedo que nos maten”, dijo una vecina del lugar.

Por ahora, los hermanos Vásquez continúan recuperándose de las heridas en el hospital Erasmo Meoz.

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El pasado 24 de julio, en la vereda La Chinita de San Faustino, una balacera que se prolongó durante dos horas entre un grupo de 100 hombres fuertemente armados que vestían camuflado y brazaletes blancos, y que se identificó como Autodefensas Gaitanistas de Colombia, y una banda rival ubicada en territorio venezolano, dejó a un hombre muerto.

En medio de la confrontación, uniformados de la Policía Antinarcóticos intervinieron y también cruzaron disparos con estos grupos ilegales.

Según algunos testigos, los tiros provenían desde un cerro en Venezuela, donde estaría atrincherado el grupo rival, al parecer, integrantes del Clan del Golfo o Los Rastrojos. 

“Se escuchaban explosiones y un fuerte intercambio de tiros que poco a poco se fue trasladando al vecino país”, dijo uno de los  policías en ese momento.