La Directiva de Fedecámaras Táchira se reunió en San Antonio, por segunda vez en esta semana, en busca de alternativas para solventar la crisis que enfrente el sector aduanero, el transporte de carga internacional, pues aseguran que se encuentran “en jaque” tras la aplicación del cierre definitivo de fronteras que se acerca ya a los 60 días.

“Más de 150 empresas aduanales podrían estar en peligro de continuar esta situación entre San Antonio y Ureña, y esto nos preocupa, porque son miles de padres y madres que viven de estas actividades. Y como estamos en frontera, la economía se maneja a través de las agencias aduanales”, señalaron los voceros.

El presidente de Fedecámaras Táchira, Daniel Aguilar; en compañía de su par en San Antonio, Isabel Castillo; y del presidente de Aceta (Asociación de Comerciantes del Estado Táchira), Pietro Ceniccola, precisaron que aunque respetan las medidas ejecutadas por el gobierno nacional, consideran que la actual situación que la situación no beneficia la industria manufacturera de ambos países.

Durante la reunión, el representante del sector comercial resaltó la necesidad de “respaldar las medidas de emergencia del sector aduanero”, y recordó que dentro del Gobierno nacional se han anunciado acciones que no se han concretado.

“Y esto no solo existe dentro del gobierno venezolano; sino también en el Gobierno colombiano, el cual tiene parte de esta situación”, dijo Aguilar, quien responsabilizó a los funcionarios de ambos países de “permitir el tema del contrabando”; ya que, según él, estos son los que se encargan de custodiar el paso binacional.

Para el gremio de comerciantes e industriales, se hace necesaria la apertura de los puentes internacionales, que se permita el paso de las gandolas represadas, ya que estas podrían perder las mercancías si se mantienen guardadas en los estacionamientos, “los cuales cobran en pesos, y llegará un punto donde muchos de estos empresarios no puedan pagar estas cantidades”.

La solución, según el presidente de Fedecámaras Táchira, es “cerrar las trochas, mas no los puentes”.

Por otra parte el sector transporte reiteró su preocupación por los problemas que atraviesa el gremio; ya que muchos de estos señalan haber quedado sin empleo, y no consiguen nuevas plazas que suplan sus necesidades como cabeza de hogar.