La acción popular de los vecinos de la torre 28 en Cormoranes ya fue presentada. Con el acompañamiento del procurador judicial administrativo, la acción está para ser admitida en la jurisdicción contencioso administrativo, indicó una fuente de la Procuraduría.

Pero, ¿qué buscan con esta acción los vecinos? La reubicación de las 20 familias que habitan en esta torre, que quieren tener una vivienda digna. 

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La salida de la torre es una alternativa y una recomendación planteada por la Procuraduría, tras evaluar los informes presentados por las entidades de riesgo en el municipio.

Los habitantes de la torre aseguraron que fueron visitados por un psicoorientador para plantearles la salida temporal del edificio mientras le hacen unos trabajos.

“Están hablando de un arriendo de tres meses, ¿y luego qué? Nosotros lo que queremos es garantía de tener un techo seguro, no seguir viviendo en esta zozobra”, dijo María Galvis, una de las vecinas. 

Las familias que se mantienen en la estructura dicen que no tienen para dónde ir. Lo contrario ocurrió con algunos, que al presentarse las primeras fallas en la edificación se fueron.  “Muchos se han ido por miedo”, dijo.

En marzo, en reunión con la comunidad, los expertos del Ministerio de Vivienda aseguraron que en dos meses habría una intervención a la torre 28, para instalar pilotes a 12 metros de profundidad, para reforzar la estructura y controlar los asentamientos de la edificación.

Ese plazo ya se cumplió. Algunos vecinos están a favor y otros en contra de los trabajos. Estos colocaron carteles en los cuatro pisos de la torre exigiendo una reubicación.