El jefe negociador del Gobierno, Humberto De la Calle, afirmó que con el nuevo acuerdo para sacar de las filas de las Farc a los menores de edad se está poniendo punto final al conflicto armado.

“Cuando las nuevas generaciones hacen parte activa del conflicto el reto de ponerle punto final es mucho mayor. Por eso es que este acuerdo es un avance crucial en este proceso de ponerle punto final a la guerra. Quisiera decirle a los colombianos que le estamos poniendo punto final a la guerra”, dijo el jefe negociador.

De la calle afirmó que las nuevas generaciones de jóvenes son las llamadas a apoderarse de la paz y liderar la transformación del país, por lo cual, en el acuerdo se contempla la creación de los pasos a seguir para efectuar la salida de los menores y el plan que se implementará para restituirle sus derechos.

“Tres importantes medidas han sido anunciadas: la salida de los menores de 15 años de los campamentos, la elaboración de una hoja de ruta que permita la desvinculación progresiva de todos los demás menores de 18 años y la creación de un programa integral para brindarle la mejor atención a estos niños que salen de la guerra”, afirmó.

Reiteró, como lo informaron los representantes de los países garantes, que con el nuevo acuerdo las Farc deberán entregar toda la información para identificar y ubicar a los menores que aún están en los campamentos y que el Gobierno creará una mesa técnica que dirigirá la Defensoría del Pueblo y la Consejería de Derechos Humanos de la Presidencia para que creen una hoja de ruta que permita la salida de los niños de los campamentos y el programa para atender a los menores.

Hoja de ruta y programa que deberá aprobar la mesa de conversaciones y que tendrá el acompañamiento de la UNICEF y la OIM para verificar el cumplimiento de todos los compromisos.

“El Gobierno tomará todas las medidas necesarias para darle pleno cumplimiento a este acuerdo y así poder implementarlo de la mano de la comunidad internacional. Siempre ha sido un interés fundamental del Gobierno Nacional sacar a los niños y niñas de la guerra y garantizar todos sus derechos, especialmente velar porque puedan vivir la niñez y la adolescencia sin estar entre fusiles”, dijo De la Calle.

El jefe negociador también aprovechó para agradecer a Leyla Zerrougui, representante de la ONU para niños y conflicto, por acompañar el acuerdo, pero también, dedicó a la directora temática de la Oficina del alto comisionado de Paz, Elena Ambriocio, el logro.

“Elena ha sido dentro de la delegación del gobierno el alama y el motor de este acuerdo que hemos construido desde hace un año que es fruto de su trabajo, de su insistencia y de su extraordinaria capacidad”, dijo, destacando que ella ha dejado de ver a sus dos hijos pequeños para que ninguna madre vuelva a sentir el dolor de estar lejos de sus hijos.

La Habana | Colprensa