En un remoto paraje del occidente se ubica el Monasterio de la Orden de la Trapa, cuya tranquilidad y silencio fue perturbado cuando cinco hombres armados y enmascarados entraron a robar.
 
Cerca de 30 personas fueron despojadas de sus pertenencias durante el asalto al recinto católico enclavado en una cumbre andina del estado de Mérida.

El Ministerio Público indicó que el crimen ocurrió el 28 de diciembre, pero la Fiscalía la dio a conocer al día siguiente.
 
Las víctimas fueron amordazadas con cintas plásticas y despojadas de sus pertenencias, incluidos dos vehículos, una motocicleta, teléfonos móviles y computadoras portátiles, destacó el escrito.

Durante el suceso resultó lesionado un empleado del lugar tras ser golpeado con un arma de fuego, se informó. Nadie ha sido arrestado por el caso.

De acuerdo con investigaciones preliminares, algunas de las personas que estaban en el lugar se encontraban en retiro espiritual.

La orden trapense, cuyo monasterio se ubica entre el poblado de Canagua y la ciudad merideña de El Vigía, se distingue por su mayor rigor en la abstinencia y el silencio.

La criminalidad figura entre los principales problemas que agobian a los venezolanos, según la mayoría de las encuestas.
 
Venezuela es uno de los países más violentos de la región con una tasa de homicidios que según registro del gobierno del presidente Nicolás Maduro está en 39 por cada 100.000 habitantes.

Sin embargo, de acuerdo a un informe divulgado a comienzo de año por la Fiscalía General, la tasa de homicidios está en 58 por cada 100.000 habitantes.