Con comercios cerrados, sin transporte público, calles desoladas y bloqueadas con barricadas, estuvo ayer Venezuela por una huelga que exige al presidente Nicolás Maduro retirar su convocatoria a una Asamblea Constituyente, tras casi cuatro meses de protestas que dejan 99 muertos.

Al cierre de esta edición se conoció la muerte de dos manifestantes que se sumaron a los 97 fallecidos, y otros tres fueron heridos, a las afueras de Caracas.

El paro se inició a las 6 a.m. dando inicio a la llamada “hora cero”, una escalada de las manifestaciones a 10 días de la elección de 545 asambleístas que reformarán la Carta Magna.

Animada por 7,6 millones de votos del plebiscito simbólico que realizó el domingo contra la Constituyente, la oposición convocó a un cese de actividades “activo”, por lo que grupos de opositores bloquearon vías con barricadas de basura y escombros.

“No importa perder una jornada de trabajo si estamos perdiendo un país. Me sumo al paro para rescatar lo poco que nos queda de él, para aumentar la presión”, dijo un participante, dueño de una pequeña empresa constructora, en Caracas.

Confrontado también a una fuerte presión internacional para que desista de su proyecto, Maduro afirma que la Constituyente va contra viento y marea.

“Ahora más que nunca”, dijo, al rechazar esta semana amenazas de sanciones económicas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

“Es un paro absurdo. La Constituyente va a acabar con toda estas bromas horribles. Ellos lo que quieren es que venga Estados Unidos a apoderarse del país”, señaló María Francis, de 53 años, empleada del Metro de Caracas, paralizado en sectores del este de Caracas.

Entre tanto, Leandro Landaeta, comerciante de Chacao, aseguró que el paro fue un éxito porque la gente se quedó en sus casas y los comercios no abrieron.

En Sabana Grande, también en el este de la ciudad, la mayoría de los locales cerró, y tampoco había transporte público.

El presidente Nicolás Maduro se declaró vencedor frente al paro, al señalar que los sectores clave de la economía operaron con normalidad.

“Hemos vuelto a triunfar, ahora rumbo al domingo 30 de julio, de victoria en victoria, máxima moral”, dijo, al referirse a la fecha de la elección de los miembros de la Asamblea Constituyente.

México pide

Entre tanto, México exhortó al presidente Maduro para que suspenda la convocatoria a la Asamblea Constituyente, al reconocer también la reciente consulta popular que organizó la oposición.

La Cancillería mexicana pidió abrir “la puerta a una negociación que lleve a resolver la grave crisis democrática por la que atraviesa Venezuela”.

Señaló además que Maduro tiene “la oportunidad histórica de abrir un nuevo camino de reconciliación y reconsiderar la convocatoria a la Constituyente, creando las condiciones para iniciar un proceso genuino de negociación política”.