El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha enfrentado varios incidentes armados desde que asumió el poder en 2013, incluidos un presunto atentado con explosivos y alzamientos militares como el ocurrido este martes en apoyo al líder opositor Juan Guaidó.
   
Insurrección
   
Un grupo de militares, cuyo número se ignora, se alzó contra Maduro en Caracas en respaldo a Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por medio centenar de países liderados por Estados Unidos.

Guaidó anunció el levantamiento en la madrugada mediante un video grabado en La Carlota, principal base aérea de la capital. Apareció con su copartidario Leopoldo López, quien aseguró haber sido liberado de su prisión domiciliaria por los uniformados.

El gobierno declaró en la noche la "derrota" de un "fallido intento de golpe de Estado".

El alzamiento fue acompañado por manifestaciones en todo el país que según una ONG de derechos humanos dejaron un fallecido en el estado Aragua (norte).

López se refugió luego en la embajada de España y 25 militares pidieron asilo en la de Brasil.

El pasado 21 de enero, 27 uniformados se habían atrincherado en un cuartel de Caracas para desconocer a Maduro, tras lo cual fueron detenidos. Esa sublevación desató protestas y disturbios con 40 muertos y 850 detenidos en una semana.

Entonces, en la antesala de una gigantesca marcha para exigir la salida de Maduro, el general de la Aviación Francisco Yánez anunció en un video que desconocía a Maduro, convirtiéndose en el militar activo de más alto rango en reconocer a Guaidó.
   
"Atentado"
   
El 4 de agosto de 2018, Maduro denunció haber sido víctima de un atentado después de que dos drones cargados con explosivos estallaran cerca de una tarima donde encabezaba un acto militar en el centro de Caracas.

El mandatario socialista culpó al diputado opositor Julio Borges, exiliado en Colombia, y al entonces presidente de ese país, Juan Manuel Santos. El hecho dejó siete militares heridos.

Por este caso fueron detenidas una treintena de personas, entre ellas dos generales y el parlamentario opositor Juan Requesens. 

El presidente estaba a punto de terminar su discurso cuando se produjo la primera explosión. Decenas de militares rompieron filas corriendo desordenadamente, mientras escoltas cubrían al gobernante con escudos antibalas. 
   
Asalto
   
El 6 de agosto de 2017, una veintena de hombres, entre ellos tres militares, atacaron el fuerte Paramacay en el estado Carabobo (norte). 

Se enfrentaron con los uniformados que custodiaban las instalaciones durante más de tres horas. Dos atacantes murieron, ocho fueron detenidos y el resto escapó con armas.

El grupo estaba comandado por el excapitán de la Fuerza Armada Juan Carlos Caguaripano, detenido cinco días después con otro de los sublevados.

Durante el asalto, Caguaripano, expulsado en de las filas castrenses en 2014 por "traición a la patria", afirmó en un video que estaba en rebelión contra la "tiranía".
   
Piloto rebelde
  
El 27 de junio de 2017, en medio de protestas opositoras que dejaron unos 125 muertos, el policía Óscar Pérez lanzó desde un helicóptero una granada sobre el Tribunal Supremo de Justicia y disparó contra el Ministerio de Interior en el centro de Caracas.  

Tras el atentado, sin víctimas, Pérez publicó videos en los que pedía junto a hombres armados la renuncia de Maduro. 

El piloto permaneció varios meses en la clandestinidad.

En diciembre de 2017 dirigió un comando que amordazó a militares y robó 26 fusiles y municiones en el estado Miranda (norte).

El 15 de enero de 2018 fue abatido junto con seis colaboradores en las afueras de Caracas, durante un operativo para capturarlo. Pérez transmitió parte del enfrentamiento en redes sociales.