El presidente Nicolás Maduro visitó ayer el estado Táchira, en el marco de su programa presidencial Gobierno Militar de Calle, para dejar en funcionamiento y presentar la Región Estratégica Integral de Los Andes, y la Región de Desarrollo Integral de Los Andes.

En el marco de esta actividad anunció que los estados Táchira, Trujillo y Mérida integran la Región Estratégica Integral de Los Andes, bajo la dirección del mayor general de la Guardia Nacional, Rubén Darío Bermúdez Pirela, mientras la Región de Desarrollo Integral de Los Andes quedó en manos del mayor general Celso Canelones Guevara.

Al inicio de su discurso el presidente se refirió a la reciente captura en el Táchira de dos sicarios colombianos. “Desde Colombia el narcotráfico ha traído a nuestras tierras cosas que no conocíamos”, manifestó durante su alocución, transmitida por la cadena oficialista Vive TV.

Destacó que convocó una reunión de emergencia para aprobar la estrategia integral porque “estamos en guerra por la paz y para que en Venezuela no entren más sicarios”, por lo que se refirió al plan de magnicidio en el que dos colombianos fueron capturados presuntamente porque pretendían asesinarlo, a él y al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.

También aseguró que trabaja de la mano con el presidente colombiano Juan Manuel Santos y su gobierno en la lucha contra los grupos irregulares que operan en la frontera.

Como parte de la actividad de Gobierno Militar de Calle, Maduro Moros hizo entrega de un lote de vehículos al componente de la Guardia Nacional acantonado en la región, así como ayudas económicas para tratamientos médicos a un grupo de militares de la zona, recibiendo además requerimientos de alto y bajo impacto para mejorar el bienestar de los efectivos militares dentro de las unidades.

Así mismo anunció recursos para la construcción de las fases posteriores de la Autopista San Cristóbal – La Fría, y para el Barrio Tricolor del sector Las Margaritas, donde se construirían 400 viviendas para familias de escasos recursos.

Cientos de personas se apostaron a las puertas del Fuerte Murachí a la espera de la salida del presidente Nicolás Maduro para saludarlo y entregarle solicitudes de ayuda.

En un hecho aislado, un joven de 20 años, integrante de la Policía Nacional, fue arrollado dentro de las instalaciones militares por una de las camionetas conducidas por los escoltas de la comitiva presidencial. El funcionario fue trasladado en estado crítico de salud a un centro médico privado de San Cristóbal, por socorristas de Protección Civil.