Un grupo de padres calcula que los niños se pierden un 40% de las clases.
Escuelas venezolanas: violencia y poca enseñanza

María Arias puso sus cuadernos en su mochila, tomó una banana para compartir con su hermano y su hermana y se encaminó hacia su escuela secundaria a través de calles estrechas y tan violentas que los taxis no se aventuran por este barrio, no importa lo que les paguen. Esperaba que al menos uno de sus profesores fuese a clase.
Pero la clase de Arte de las 7 de la mañana fue suspendida luego de que el profesor se reportase enfermo. La de Historia había sido cancelada. No hubo clase de Gimnasia porque el profesor fue asesinado a tiros pocos días antes. Por la tarde, el profesor de Español recogió las tareas que había asignado y envió a los chicos a sus casas para acatar un toque de queda impuesto por las pandillas.
“Te sientes atrapada”, dijo la niña de 14 años, con los labios pintados de rosado, sentada a la sombra de un mango en la entrada de la escuela. “Tú esperas, y esperas y esperas para horas. Pero hay que venir para salir de aquí”.
En realidad, los niños venezolanos se pierden un 40 % de las clases, según calcula un grupo de padres, y aproximadamente una tercera parte de los maestros no van a trabajar un día a la semana para hacer fila en los supermercados en busca de comida.
En la escuela de María tantos alumnos se han desmayado de hambre que los directores les dicen a los padres que los dejen en sus casas si no han comido. Y si bien las escuelas cierran con llave sus puertas todas las mañanas, ladrones armados, a menudo adolescentes, se las ingenian para ingresar y robar a los alumnos en los recreos.
La cruel realidad
“Este país ha abandonado a sus niños. Las consecuencias van a ser gravísimas. No se verá inmediatamente, sino a futuro, y esto no es recuperable”, afirmó la portavoz del Movimiento de Padres Organizados Adelba Taffin.
Venezuela es un país joven. Más de una tercera parte de la población es menor de 15 años y hasta hace poco las escuelas eran de las mejores de América del Sur. El finado presidente Hugo Chávez hizo de la educación una de las piedras fundamentales de su revolución socialista y usó la riqueza derivada a un boom petrolero para capacitar maestros y distribuir computadoras portátiles gratis. Incluso renovó la escuela de María, que da clases a 1.700 estudiantes, e instaló una nueva cafetería.
En pocos años, todo ese progreso quedó en la nada. Una caída de los precios del petróleo combinada con años de mal manejo de la economía ha causado estragos. La tasa de deserción escolar se duplicó, más de una cuarta parte de los adolescentes no está matriculada y no hay suficientes maestros, pues muchos se han ido del país.
La escuela de María se encuentra entre un barrio marginal y lo que supo ser un barrio de clase media de Caracas. Afuera de la capital, donde las escuelas cierran a veces por semanas, hay todavía menos alimentos, agua y electricidad.
Conversadora y tan estudiosa que sus compañeras le dicen “Wikipedia”, María empezó el año soñando recibirse de contadora y vivir en París. Sus padres ahorraron para comprarle 12 cuadernos nuevos, uno para cada materia. Nueve meses después, muchas páginas siguen en blanco.
María tiene dos horas libres pues se suspendió la clase de inglés. Su hermana no recibe clases de matemáticas.
El orgullo no sirve
Su profesora de contabilidad se ausentó hace poco una semana y media. Al regresar una tarde, Betty Cubillán se limitó a corregir tareas. María usó el teléfono de una compañera como calculadora para tratar de averiguar por qué sus respuestas tenían tantos ceros, mientras sus compañeras posaban sus cabezas en sus escritorios.
Cubillán dice que va a clases lo más que puede al tiempo que trata de salir adelante con el equivalente a 30 dólares al mes.
“Si no hago la cola, no tengo para comer”, contó la profesora.
Hasta un 40 % de los profesores se ausentan periódicamente para hacer colas para comprar alimentos, de acuerdo con la Federación de Maestros de Venezuela. La directora de la escuela solicitó a los supermercados de la zona que les permitan a los profesores no hacer la cola. Y ha castigado a profesores por dar buenas notas a cambio de cosas como leche y harina.
En un país que figura entre los más violentos y caóticos del mundo, apelar al orgullo de los profesores no sirve de mucho.
Al final una sonrisa
Los alumnos juegan a los dados en el patio e intercambian insultos y fajos de billetes. El patio funcionaba como gimnasio hasta que el profesor murió al quedar en un fuego cruzado mientras trabajaba como barbero para redondear ingresos. Varios maestros han sido asesinados en la capital este año.
Al cierre de la jornada escolar, María se quedó con algunas amigas. Un compañero le mostró un gorrioncito que había encontrado en un árbol del patio. “Deberíamos comérnoslo”, dijo el muchacho.
Las niñas se acercaron y examinaron el pajarito. María se alegró mucho cuando abrió las alas. Fue la primera vez que rio en todo el día.
AP
Ayúdanos a seguir haciendo periodismo de calidad
Contribuye aquíComentarios
+ NOTAS
Duque sostuvo encuentro con Lenín Moreno en la frontera
El mandatario sostuvo conversaciones con Lenín Moreno sobre diferentes temas.
Antes de morir, Ana Benilda Becerra salvó a sus vecinos
Un cortocircuito provocó la tragedia en el barrio La Castellana.
La avenida del Río será más deportiva y familiar
El centro de pensamiento del Área Metropolitana tiene unos 61 proyectos estructurados para Cúcuta.
COVID-19, en aumento en la región de Pamplona
Se conocen casos de gente de los municipios de la provincia y de Toledo que llegan a la región a hacerse la prueba de coronavirus.
La delegación regional que estará en la Vuelta al Táchira 2021
Tres equipos representarán a Norte en la edición 56 de esta clásica del continente.
La muerte sigue rondando por La Parada
Jonathan José Seijas llegó hace unos meses a La Parada a trabajar pasando gente y mercancía por las trochas.
Desde hoy, alcaldía empieza a expedir paz y salvo de predial
La Secretaría de Hacienda informó que en esta oportunidad el documento se entregará mucho más pronto que años anteriores.
Tercer toque de queda se cumplió dentro de lo presupuestado
En total fueron impuestos 843 órdenes de comparendo en la ciudad y el área metropolitana.
La pandemia obliga a postergar los retiros espirituales
“No existen condiciones para el encuentro", Jairo López, presbítero de la catedral de Santa Ana.