Tatiana de los Ríos tiene algo muy claro en su vida: no quiere seguir siendo “la modelito”. Después de ganar el Desafío Caracol, sintió que estaba un poco vacía. Entonces la invitaron a actuar en la obra de teatro ‘Las curvas del amor’, junto a Ramiro Meneses.

La modelo paisa, casada con el empresario caleño Karim Gorayeb, ahora debuta en una serie de televisión como villana, ‘Bazurto’, que se grabó en Cartagena y se estrenará en enero próximo. Allí interpreta a Mireya, quien se encubre tras la fachada de una camarera, pero en realidad pertenece a una banda de delincuentes en la que obtiene lo que se propone, debido a sus atributos, y no solo físicos.
 

¿Quién es Mireya, su papel debut en una serie de televisión?

Es una especialista en robos. Es la más mala de la banda de delincuentes. Fue muy divertido interpretarla, porque ella no solo es fuerte por dentro, sino físicamente, se le mide a todo. Sabe de disfraces, de idiomas, es como la Nikita, que planifica las operaciones, es la cabeza de la organización. Fue una preparación física muy ardua, aunque yo he hecho deportes toda la vida. Y era divertido cuando todos nos combinábamos, la banda, el sabor de Cartagena, de la champeta, la acción, el drama y el suspenso.

¿Cuáles fueron las escenas más difíciles?

Hubo una, durante el robo del banco, lanzándome de un muro de tres metros, en la que me fracturé el metatarsiano (hueso del pie), estuve enyesada por tres meses. Todo por la adrenalina, estoy muy entusiasmada, porque es mi primer personaje y quería hacer todo yo sola, sin dobles. Estaba súper gomosa, feliz. Si me vieran estudiando... de verdad, uso mil colores para subrayar los libretos, amo la actuación y la oportunidad que me está dando Dios. Ando súper ‘nerd’.

¿En qué otros proyectos ha participado?

Después de esto me fui a estudiar actuación a Nueva York, en la academia de Lee Strasberg (allí estudiaron las ex reinas y actrices Taliana Vargas y Valerie Domínguez).Volví a Colombia y me siento más preparada, estoy feliz, y me han ofrecido más proyectos. En dos semanas empiezo a rodar una película en Bogotá con el director Gustavo Nieto Roa, ‘Estrella quiero ser’. Mi personaje es Sofía, al lado de Lincoln Palomeque y es opuesto al de Mireya, en ‘Bazurto’; es una mujer muy glamurosa, con mucho poder y dinero, que abusa de eso. Se espera que el lanzamiento sea en Semana Santa. Para mí estos personajes han sido bendiciones, cada uno me regala un poquito de experiencias que me han servido mucho.

¿Eso quiere decir que ha dejado de lado el modelaje?

Pasó a un segundo lugar, no lo he dejado del todo, simplemente mi prioridad es la actuación. Quiero que me empiecen a ver como a una actriz. Y para cambiarle el chip a la gente, uno tiene que empezar por uno mismo. He dejado un poquito el modelaje, mi prioridad es la actuación y es mi pasión. Tengo a la gente harta de oírme decir esto, pero soy muy feliz actuando.

¿Quién la involucró en el mundo de la actuación?

Después de ganarme ‘El Desafío’, terminé rara por el aislamiento y me retiré un poco del modelaje, y por sugerencia de un amigo que me dijo que me fuera a viajar para reencontrarme, lo hice, pero, la verdad, no me encontré mucho. Volví a Colombia y en 2009 me propusieron hacer una obra de teatro con Ramiro Meneses, ‘Las curvas del amor’. Ramiro me ayudó mucho, en Bogotá me prepararon Vicky Hernández e hice talleres con Alejandra Borrero. A la gente le encantó y empecé a prepararme como actriz. Cuando me llamaron para ‘Infraganti’, dije, ‘me quiero dedicar a esto’, tomé cursos intensivos hasta que llegó ‘Bazurto’.

¿Tuvo que aprender alguna disciplina deportiva?

Sí, tuvimos un entrenamiento de armas y físico, para las escenas de persecuciones, saltos y peleas. Lo único que no hice fue bailar champeta.