La denominada revolución industrial 4.0. no solamente trae una nueva dinámica sobre las profesiones, la forma de contratación, la vinculación de robots al mundo del trabajo y la inteligencia artificial al servicio de las empresas, sino que conlleva a retos en la salud y seguridad de la población trabajadora y sus condiciones intra y extralaborales.

Ante esto y en el marco de la conmemoración el 28 de julio del Día Nacional de la Seguridad en el Mundo del Trabajo, se hace necesario recordar los peligros y riesgos generados por el uso de las TIC, así mismo en el aprovechamiento y optimización de procesos de cara a estar más cerca de los trabajadores y las empresas.

Para Francisco Salazar Gómez, presidente de Positiva Compañía de Seguros, uno de los mayores riesgos que enfrentan los trabajadores con el uso de las TIC es en el ámbito psicosocial en diferentes aspectos al presentarse un desequilibrio entre la vida laboral y la vida personal con ocasión de la permanente percepción de estar ‘disponible’ en todo momento para el trabajo.

"El aislamiento producto del trabajo a distancia y la falta de interacción social, la inseguridad en el trabajo debido a las diferentes condiciones de contratación que aún no están reguladas y el ciberacoso, ciberagresiones y ciberataques por el uso inadecuado de las Tics", apuntó.

Entre las afectaciones también se encuentra el tecnoestrés que es la adicción a la tecnología y la sobrecarga de trabajo que pueden llevar a una mayor presión para mejorar el rendimiento (tomarse menos pausas, correr riesgos, recurrir a las drogas para mejorar el rendimiento, etc.)  En el aspecto ergonómico, el directivo señaló que se presenta mayor utilización de dispositivos móviles y del trabajo sedentario y eso aumenta el riesgo de contraer afecciones de salud relacionadas con trastornos músculo esqueléticos, fatiga visual, obesidad, cardiopatías, entre otras. También hay riesgos ante la exposición a campos electromagnéticos.

El análisis de enfermedad laboral reportado por las empresas afiliadas a Positiva se asemeja a las circunstancias actuales del contexto de otros países, donde las enfermedades psiquiátricas y las afecciones osteomusculares no representan una significativa causa de muerte, pero si son los tipos de alteraciones que más morbilidad generan actualmente y tienen mayor prevalencia.

En respuesta a estas problemáticas Salazar Gómez considero fundamental participar activamente en las diferentes políticas que plantea el actual gobierno, así como en proyectos liderados por instituciones como el Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Salud con el fin de aunar esfuerzos en marco a la gestión de promoción y prevención. A la par, el crear un marco para aclarar las obligaciones y responsabilidades en materia de salud y seguridad en el trabajo que surgen con los nuevos sistemas y las nuevas formas de trabajar.

"Aplicar un enfoque proactivo y centrado de la persona trabajadora en la planificación y la ejecución de estrategias de digitalización. Realizar evaluaciones avanzadas de los riesgos en los lugares de trabajo, aprovechando las oportunidades sin precedentes que ofrecen las tecnologías digitales. Avanzar en la alfabetización del uso responsable de las TIC para así focalizar la gestión y lograr los adecuados controles de los riesgos", agregó el experto.