Este mes se conoció que los papás de unos estudiantes en Estados Unidos recibieron una carta de los docentes en los que les pedían que no permitieran que sus hijos llevaran a la escuela el Fidget Spinner.

Este juguete, aunque parezca simple, está causando furor en algunos colegios de Estados Unidos y Reino Unido, en donde han pensado hasta en prohibirlo, porque según los docentes, se está convirtiendo en una herramienta de distracción y los estudiantes no se concentran en las clases.

El Fidget Spinner consta de tres aros entrelazados, con un círculo central que funciona como eje para que los aros giren y giren sin parar.

Fue creado hace más de dos décadas como herramienta terapéutica para pacientes con problemas de autismo, déficit de atención, estrés, ansiedad y depresión, pero ahora lo están usando con fines recreativos.

La creadora perdió la patente

Catherine Hettinger creó el Fidget Spinner para entretener a su hija de siete años que sufría de autismo.

En 1997 logró registrar el invento, pero ocho años después perdió la patente porque no tuvo 400 dólares para renovarla.

Ahora, los nuevos fabricantes son los que tienen el negocio redondo fabricando y vendiendo millones de Fidget Spinner alrededor del mundo.

Con información de internet