Apple publicó este jueves una carta dirigida a sus clientes en la que pide perdón por lo que ellos llaman un malentendido, después de que dieran las razones por las cuales algunos iPhone 6 y iPhone 6S estaban funcionando más lento, un fenómeno conocido como ralentización.

En vista de la controversia que ha generado esa situación, la compañía tecnológica le ofreció a los usuarios de esos dos modelos en todo el mundo la posibilidad de cambiar las baterías. A finales de enero de 2018 (no se ha confirmado la fecha exacta), y hasta diciembre de ese año, quien crea que su teléfono está más lento y el problema sea una causa del deterioro de la batería, podrá cambiar el componente por 29 dólares, 50 menos del precio actual, 79.

Esta decisión de la empresa se da una semana después de que reconocieran que ralentizan intencionalmente esos teléfonos cuando los usuarios actualizan el software iOS, pero, según ellos, lo hacen para alargar la vida de la batería de los celulares y de esa forma evitar que el equipo deje de funcionar por el uso continuo cuando alcanza grandes picos de productividad.

Las explicaciones fueron insuficientes para algunos clientes, y esta semana en diferentes ciudades de Estados Unidos algunos se unieron para presentar demandas colectivas acusando a Apple de fraude.

La empresa se excusó por haber decepcionado a sus clientes y aseguró que tienen un compromiso con las personas que confían en su marca. Además de comprometerse a cambiar las baterías anunció que la próxima actualización de su sistema operativo incluirá una herramienta para que los usuarios conozcan el estado de la batería de su iPhone y decidan si deben cambiarla o no.

“Somos capaces de trabajar en lo que nos gusta gracias a la fe y el apoyo de ustedes, y nunca lo olvidaremos o lo daremos por descontado”, aseguró la compañía en la carta a sus clientes.