Aunque Corponor ha insistido de forma categórica en la necesidad de que la empresa Cenit modifique el plan de contingencia haciendo inversiones para tener más puntos de control y contención ante derrames de crudo por cualquier origen, para proteger las fuentes hídricas del departamento, no se descarta la posibilidad de emprender acciones legales para que esto se cumpla.

Según Gregorio Angarita, director de la entidad, si la situación no se corrige “de manera concertada, adelantaremos otra clase de acciones y si llegase a ser necesaria una vía judicial, lo haríamos”.

Sin embargo, Angarita espera que haya resolución hoy con un encuentro que se tendrá, luego de un sobrevuelo sobre el río Catatumbo y el área afectada por la más reciente voladura del oleoducto Caño Limón-Coveñas, en Toledo.

El funcionario anunció que al sobrevuelo acudirá el ministerio de Ambiente, la Anla, un equipo técnico de Corponor, así como Ecopetrol y cenit para verificar el estado de las fuentes hídricas.

“La reunión permitirá ratificar nuestras solicitudes que también han sido respaldadas por la Gobernación y el Consejo Departamental de Gestión del Riesgo”, expresó.

Luego de la revisión de los afluentes afectados por las voladuras mesa de trabajo se deberá definir el cronograma y estrategias para: la limpieza de las áreas afectadas; estabilización de la zona que incluye la valoración integral de los predios que, hasta el momento suman 2.140 hectáreas en Teorama, Tibú, El Tarra, y ahora Toledo; y las actividades de recuperación y restauración ambiental.