Durante 16 años, el grupo de aventura Rokaice se ha mantenido promoviendo los deportes extremos, las caminatas ecológicas, las escaladas de picos y cumbres colombianas.

Para estar en forma periódicamente hacen caminatas a los municipios de la Provincia y al páramo de Santurbán. Estas actividades las hacen acompañados de jóvenes que les gusta disfrutar de la naturaleza y del rapel, con descensos de hasta 800 metros. También se detienen a mirar aves, insectos y demás componentes del medio ambiente.

El líder del grupo, Román Antonio Flórez Bautista, tiene 22 años de estar practicando los deportes de riesgo. Él, dice que esta pasión afloró cuando quiso conocer la nieve que veía en televisión y también porque lo impulsaba el deseo de hacer algo por defender la naturaleza.

Poco a poco el sueño se fue concretando cuando con varios amigos formaron un grupo para caminar, escalar y explorar. Siempre lo ha acompañado su esposa, Gloria Duarte, quien aprendió a perderle el miedo a las alturas y a los acantilados.

Rokaice además de las acostumbradas salidas por los caminos reales, se ha desplazado a escalar los nevados del Ruiz, Santa Isabel, del Tolima y Cocuy.

Estas aventuras igualmente los han llevado al exterior a pisar la nieve del Chimborazo, el volcán y la montaña más alta de Ecuador, al igual que el Cotopaxi, 

“Nuestro próximo objetivo es hacer la cumbre más elevada de América, El Aconcagua (Argentina)”, sostuvo Flórez.

A nivel regional han hecho salidas de hasta cuatro días a los sitios y lagunas más emblemáticas de Santurbán.

Flórez Bautista dijo que en las próximas semanas se alistan para volver a Morro Nevado (4.500 metros sobre nivel del mar), que es el pico más elevado que limita con los departamentos de Santander y Norte de Santander, complejo que hace parte de Santurbán.

Allí está la laguna verde, que es considerada una de las más altas del país. Para el fundador de Rokaice, desde Morro Nevado cuando está despejado se aprecian ocho lagunas del entorno, al igual que el Lago de Maracaibo (Venezuela), la Sierra Nevada de Mérida y en Colombia el Cocuy.

“Una vez al año tenemos el compromiso de ir a ver la nieve”, dijo el profesor Flórez, quien con sus compañeros sirve de guía a quienes les gusta la aventura extrema.