Las horas de cansancio y las heridas que sufrió el subintendente David Reyes Jiménez mientras manipulaba la bomba que dejó el Eln en el Anillo vial oriental, la madrugada de este lunes, no fueron impedimento para que las autoridades continuaran con su trabajo.

En la mañana, otro artefacto fue dejado en el puente jorobado del barrio La Merced.

El silencio y la tensión acompañaron a los expertos antiexplosivos del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía durante más de dos horas, luego de que 'Cronos', un perro antiexplosivos diera la señal positiva de la existencia del artefacto explosivo que estaba adentro de una caja de cemento, ubicada al lado de un poste a la orilla del puente que comunica al barrio Lleras con La Merced.

Vea En imágenes, la detonación de los explosivos en el Canal Bogotá

“El perro se sentó y de una vez supimos que era la señal. De inmediato se activaron los protocolos para detonarla de manera controlada. En la caja había dos radios y un cable azul, rodeados de esquirlas de vidrio”, dijo un funcionario judicial.

Según se conoció, al parecer, dos miembros del Eln arribaron a las 6:00 de la mañana en un carro hasta esta zona y arrojaron la caja. Minutos  después, un habitante de calle se acercó y al notar los cables, de inmediato le avisó a algunos vecinos para que alertaran a la Policía Metropolitana de Cúcuta.

Cuando los uniformados llegaron, se dieron cuenta de la nueva amenaza de bomba, que completó el tercer hecho registrado en Cúcuta y el área metropolitana en un lapso de seis horas, desde la medianoche del domingo.

“Aproximadamente había seis kilos de explosivos. Presumimos que era pentolita. Había que tener mucha precaución, porque tenía el mismo método de activación de radiofrecuencia (a través de un radio de comunicación con la misma frecuencia), igual al artefacto que lesionó al policía”, dijo otra fuente judicial.

Por esto, los técnicos hicieron al menos cuatro acercamientos a la caja, con el fin de disminuir los riesgos de que estallara antes de lo planeado.

Sobre las 9:30 de la mañana, el grito previo de “fuego en la zona”, de uno de los encargados del procedimiento, dio paso a una fuerte explosión que estremeció a los vecinos y curiosos que a esa hora rodeaban la escena del hecho.

Una gran nube de humo y piedras salieron expulsadas hacia las casas vecinas, rompiendo vidrios y algunos ventanales a su paso.

El susto invadió a las personas que merodeaban el sector, muchas corrieron buscando un refugio, mientras que otras no salían del asombro por el atrevimiento de la guerrilla del Eln de instalar una bomba en el casco urbano de Cúcuta.

Una vecina dijo que los nervios la invadieron tras la explosión, por lo que se resguardó en la cuadra vecina mientras todo retornaba a la calma.

“Cuando nos avisaron vine para mi casa a ver qué había pasado y encontré los vidrios de las ventanas rotos y el techo levantado en la parte del patio”, dijo.

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Asimismo, un habitante del sector, le pidió al Eln que no continúe con estas acciones que afectan a la población civil.

Puente García Herreros

Alrededor de una bandera roja y negra, las autoridades encontraron un paquete bomba entre una caja de cartón con luz led, que también tenía cables y radios, en el puente García Herreros, rodeado de grafitis en la estructura y el asfalto, alusivos al Eln. Fue hallado a la medianoche del domingo, en medio de una balacera que se oyó en las inmediaciones del lugar.

En este sector se activaron los mecanismos de seguridad de la Policía Antiexplosivos, pero cuando el subintendente David Reyes Jiménez, manipuló el paquete, fue activada la carga, ocasionándole heridas en las manos y los pies. Fue trasladado a la clínica Medical Duarte.

Las autoridades informaron que el uniformado no tenía heridas graves, sin embargo, podría perjudicarse su sistema auditivo.

En Villa del Rosario

Los habitantes del conjunto residencial Los Mangos, ubicado en La Parada, fueron alertados sobre la 2:00 de la madrugada de ayer, de que tenían que desalojar sus viviendas por la amenaza de cilindros bomba en un sector solitario alrededor del conjunto, que comunica al megacolegio del lugar.

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Hasta allí arribaron miembros del grupo Antiexplosivos de la Policía y la Fiscalía, donde adelantaron todos los procedimientos respectivos y después de varias horas, se oyó una pequeña detonación.

El coronel José Luis Palomino López, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, arribó al sitio y aseguró que eran dos cilindros  que no contenían explosivos.

“Todo el andamiaje,  cables rojos y azul, generaba como si tuviese un explosivo de alto poder. En realidad estaba más para generar la actividad mediática que generó”, dijo Palomino.

Sobre las 7:30 de la mañana, el oficial les agradeció a los vecinos por la paciencia y confianza en las autoridades para solucionar el hecho.

Entre tanto, Eugenio Rangel, alcalde de Villa del Rosario, decretó que se prohibía el porte de armas, el parrillero hombre y el transporte de cilindros de gas y escombros a partir de las 6:00 de la mañana de ayer, hasta las 6:00 de la mañana del próximo martes 25 de febrero.

En Aguas Claras

Este lunes, presuntos miembros de Los Pelusos, interceptaron los vehículos que transitaban en la vía Ocaña-Convención, en el sector La Cantina, obligaron a los conductores a bajarse y posteriormente los quemaron.

En el hecho resultaron quemados un camión cisterna que transportaba combustible, una camioneta y un camión de estacas. 

Los autores del hecho le insistieron a los dueños de los vehículos que respetaran el paro armado indefinido que anunciaron en la zona del Catatumbo.

Según se conoció, el desabastecimiento continúa en esta zona del departamento, por algunas vías que continúan bloqueadas.