El alto número de secuestros que se registró solo en agosto encendió las alarmas de la Procuraduría Regional de Norte de Santander, por lo que desde esta dependencia se hizo un llamado urgente a las autoridades del departamento para que intensifiquen las medidas de seguridad y las labores para que los retenidos vuelvan a la libertad.

Durante el más reciente Subcomité de Prevención, Protección y Garantías de no Repetición, el delegado del Ministerio Público en la región, Libardo Álvarez García, alertó que de los cinco casos de secuestro que se presentaron en el mes pasado, tres fueron  en la Provincia de Ocaña (Adalberto de Jesús Casadiego, Jorge Elí Sanguino y Luis Eduardo Rodríguez).

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En ese sentido, le pidió a la Policía y al Ejército intensificar las acciones contra los diferentes grupos armados e ilegales que delinquen en el departamento, y especialmente en la zona del Catatumbo.

De la misma forma, solicitó reforzar las medidas de seguridad de los defensores de derechos humanos que ejercen su labor en esta región.