Los 300 habitantes del corregimiento Bábega (Silos), están atemorizados por el riesgo de una nueva avalancha, ante la creciente de la quebrada Miracielo.

Los torrenciales aguaceros les han hecho recordar episodios amargos como las emergencias que padecieron el 23 de agosto de 2012 y del 2 de octubre de 2015. Para evitar una tragedia como la ocurrida en 1954, en la que murieron varias personas, algunas familias decidieron abandonar el poblado y establecerse en las zonas más altas.

La líder comunal, Belcy Rivera Lizcano, manifestó que el miedo es generalizado y que la gente el pasado lunes aseguró parte de las pertenencias ante la amenaza de una nueva creciente.

“Esa noche desde la parte alta se escuchaba un estruendo terrible y la quebrada estuvo a punto de salirse del cauce e inundar las casas”, afirmó la presidenta de la junta de acción comunal de Bábega, Edilma Hernández Mogollón.

Reubicar, es la solución

El alcalde de Silos, Orlando Portilla Mantilla, visitó la zona para conocer la situación generada con los aguaceros de las últimas semanas.

Explicó que para evitar cualquier calamidad la administración municipal dispuso de un megáfono y la iglesia Católica hará sonar las campanas cuando exista una emergencia.

Los campesinos del sector Los Rincón y del área de influencia tienen el compromiso de informar vía telefónica, constantemente cual es el comportamiento de la quebrada para que en caso de una eventualidad se puedan evacuar las viviendas.

Considera que para acabar con el problema generado por la quebrada Miracielo, lo más urgente es que se reubique el centro poblado, porque sus habitantes están expuestos a una tragedia.

Tienen el compromiso de gestionar ante las autoridades departamentales y nacionales las ayudas necesarias para lograr la reubicación de la población, al considerar que sería la única manera de acabar de raíz el problema que genera la quebrada Miracielo.

El alcalde Portilla, viendo la necesidad de la población ante la carencia del servicio de agua potable y de alcantarillado, invirtió en la reparación de los dos sistemas.

Alerta roja

Los organismos de gestión del riesgo y atención de desastres en Ocaña, declararon la alerta roja en este municipio ante el impacto de las lluvias en las últimas semanas.

La Secretaría de Planeación y el Consejo de Gestión del Riesgo, alertaron a los presidentes de las juntas de acción comunal para que sigan las indicaciones por tanto las lluvias vienen acompañadas de vientos huracanados, que en anteriores épocas invernales han causado emergencias.

De acuerdo con el capitán William Alonso Pacheco Ortiz, coordinador del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, la alerta roja es para las áreas aledañas a las riberas del río Algodonal.

Los pronósticos del Ideam afirman que la temporada de lluvias se extenderá hasta mediados de junio, con  riesgo de inundaciones, tormentas eléctricas y vendavales. Podría ampliarse y consolidar un fenómeno La Niña.

Algunos de los sitios más propensos a ser impactados por crecientes de los ríos son las fincas ubicadas en Guayabal, en la entrada a La Playa, el Batallón Santander y el corregimiento La Ermita.

“Los agricultores deben informar oportunamente a los organismos de socorro para que se activen los planes de contingencia de manera oportuna. Se recomienda alejar los animales de corral de las riberas del río y las cosechas”, dijo Pacheco Ortiz.

La Opinión