Competitividad, ese es el concepto que durante los últimos años más se repite en las reuniones gremiales de Norte de Santander, pero en el que el departamento sigue perdiendo terreno.

Durante la socialización del Índice de Competitividad Departamental se conoció que en 2015 la competitividad del departamento alcanzó una puntuación de 4,19, en una tabla que tiene un puntaje máximo de 10 y que mide 10 pilares diferentes.

Con este resultado, Norte de Santander ocupó el puesto 17 entre 25 departamentos, cayendo tres escalones en relación a 2014 cuando se situó en la casilla 14 y uno más lejos de 2013, año en que alcanzó la posición 13.

Sin duda, son varios los aspectos en que se deben trabajar; en eso estuvieron de acuerdo los voceros y representantes gremiales que participaron en la reunión. Y es que el departamento fue el que más puestos perdió en el estudio que mide 90 variables diferentes, que se basan en datos reales, es decir, que no recoge información de percepción.

Uno de los resultados que más preocupa es el de la falta de innovación y dinámica empresarial, en donde se alcanzó un puntaje de 0,85 puntos, ocupando el puesto 17 a nivel nacional.

En este renglón, por ejemplo, el retraso se explica en que por cada peso que invierte Norte de Santander en actividades de ciencia y tecnología, una región  como Caldas, que es líder en el país, invierte $9,8. En este sentido, mientras la inversión de Caldas fue de $56.870 per cápita  en 2015, la nortesantandereana apenas llegó a $5.771 per cápita.

A esto se suma la falta de patentes, en donde, según las cifras de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), los empresarios e investigadores de las región obtuvieron apenas 4 patentes entre 2006 y 2014.

La educación superior, con muy malas calificaciones en los índices de calidad, es una de las problemáticas que más preocupa.

Uno de los ejemplos entregados por los investigadores del Consejo de Competitividad, es que solo el 0,6% de los estudiantes matriculados en carreras profesionales de las universidades que funcionan en el departamento, están en programas con acreditación de alta calidad.

De acuerdo con el informe, los peores resultados en este segmento se obtuvieron en la calidad de los docentes y los programas de acreditación, que ocuparon el puesto 20 a nivel nacional, con unas de las notas más bajas en todo el país. Además del bajo número de grupos de investigación de alto nivel.

Para cerrar el podio negativo de competitividad del departamento, está el pilar de eficiencia de mercados, en el que se miden aspectos como el desarrollo financiero, el mercado laboral y la facilidad para hacer negocios. Aunque el informe asegura que existen serios retrasos en temas como los trámites en línea y la facilidad para abrir nuevas empresas, los voceros de la región explicaron que no se están teniendo en cuenta acciones como la ventanilla única para los empresarios.