“Joven pasa la paz”, ese es el mensaje que 26 organizaciones juveniles y siete líderes comunales transmiten en la región. 

La Red Joven Pasa la Paz está compuesta por fundaciones, corporaciones, asociaciones, juntas, líderes y parches de 12 municipios de Norte de Santander, creadas y administradas por ciudadanos menores de 35 años.

Hablar de paz suena a locura en un departamento que ha sido afectado históricamente por el conflicto, y donde aún se libra una guerra entre grupos armados ilegales por el control del Catatumbo.

Por eso la nueva generación, los jóvenes que nacieron y se criaron en una Colombia que contaba diariamente sus muertos por la televisión, y actualmente le da la espalda al acuerdo firmado con las Farc, lideran la lucha por instaurar los cambios que la paz trae para la región.

El sueño de estos jóvenes es impulsar una cultura que erradique el conflicto, y sus organizaciones buscan conquistar espacios de participación en la toma de decisiones de cada corregimiento, vereda, municipio y ciudad donde están presentes.

Los miembros

Dentro de la red hay una gran variedad de organizaciones, que a través del baile, la música, los derechos humanos, la agricultura, el medio ambiente, la poesía y el emprendimiento, intentan difundir el mensaje de construir una cultura de paz. 

En Convención está Brisas de la panela, dirigida por Yonhjames Sanguino y enfocada hacia la danza folclórica. Este grupo trabaja desde hace tres años en el casco urbano y la zona rural del municipio.

Sanguino señala con orgullo que le han quitado 60 jóvenes a la guerra, enamorándolos del arte y la cultura.

El director y maestro de danza considera que los jóvenes son la herramienta fundamental para la construcción de una paz sostenible, “ellos tienen la capacidad de transformar la adversidad, pues son un cúmulo fuerte y lleno de esperanza”.

La red se extiende a Los Patios, con la organización Zoon politikon, a Pamplona con el Colectivo Escuela Paulo Freire, y en El Zulia con el grupo Jóvenes Emprendedores de El Zulia (JEZ), los futuros empresarios del municipio.

En Villa del Rosario está el Colectivo Villa Urbana, que a través del ‘breakdance’ quiere impulsar y borrar el estigma que hay sobre el arte urbano. En Puerto Santander, los grupos Líder Juvenil y Enlace de Juventud buscan construir espacios para el debate político.

En El Tarra, la organización Joventar y su director Gerson Jiménez, le apuestan al empoderamiento de los jóvenes en políticas públicas. 

Jiménez denuncia que en el municipio desconocen a las bases juveniles, negándoles la participación en los espacios políticos. Por eso, su organización busca empoderar a los jóvenes de todas las edades para que en el futuro sean ellos los encargados de manejar esos temas. 

En Sardinata se encuentran las organizaciones Irradiarte, El Parche y la Asociación Cultivadores de Paz de las Mercedes. El colectivo de radio y televisión, Irradiarte, realizó cinco producciones audiovisuales para rescatar la tradición oral del municipio, estas serán subidas al canal de Youtube Telesar, un espacio comunitario en la red administrado por los jóvenes. 

En Tibú, al borde del Catatumbo, Luis Almarza dirige la Fundación tibuyanos unidos, quienes han capacitado a los presidentes de juntas de acción comunal en liderazgo, formulación de proyectos, además de hacer programas de promoción de la reconciliación, la no violencia contra la mujer, y la generación de identidad cultural a través del arte.

Al igual que la mayoría de las organizaciones, la Fundación tibuyanos unidos no ha recibido apoyo del Estado en ningún momento, “han sido más las ganas de los asociados y la colaboración de la comunidad”.

Almarza dice que en la región ven cada vez más cerca el objetivo de la paz, no obstante “entre más nos acercamos, más complejo se hace alcanzarla”.

Las otras organizaciones en Tibú son Renacer Catatumbo, Corporación Catatumbo jóvenes para la paz y el desarrollo social, Oro negro crew y FDC crew.

Cúcuta, la sede principal

(Las organizaciones que hacen parte de la Red Joven Pasa la Paz se reúnen para hacer talleres, foros y mesas de trabajo.)

En la capital del departamento hay 10 organizaciones juveniles inscritas en la red:

Jóvenes Gestores de Paz (Joenpaz), Todos por el Desarrollo Sostenible (TDS), Quinta con quinta crew, Centro de derechos humanos e innovación social (CDHIS) y Acción Poética.

También están Movimiento Analítico para la Transformación Social (MATS), Fundación Humanitaria vive Cúcuta, Corporación Social Pensando Diferente, Juventudes Unidas por la sostenibilidad del planeta y Ciudad Verde.

Estas organizaciones son las encargadas de hacer llegar el mensaje de la paz y la reconciliación a los oídos de los más de 650 mil habitantes de Cúcuta.

Natalia Rangel señala que su corporación Jóvenes gestores de Paz (Joenpaz) tiene como motivación, “las ganas de salir adelante de la nueva generación de nortesantandereanos”.

Rangel indica que se debe implementar la Ley 1622 del 2013 para que haya una incidencia real de los jóvenes en la toma de decisiones de la política pública. En esta ley se reglamentan los consejos y asambleas para la juventud en los planes de gobierno municipales y departamentales. 

Laura Castro, representante legal de Joenpaz, considera que la historia que se tiene sobre lo ocurrido en la región durante la época de la violencia bipartidista y paramilitar, impedirá que las barbaries se repitan.

Además de las 26 organizaciones, líderes sociales de El Tarra, Teorama, Puerto Santander y Hacarí, asisten a los encuentros de la red. 

Con un alcance de 12 municipios, el cual esperan aumentar antes de fin de año, los líderes juveniles del departamento seguirán apostándole a “pasar la paz”.

Daniel Villán | daniel.villan@laopinion.com.co