De niña, Kelly Moreno Maldonado, cambió los juegos por la música y disfrutaba largas jornadas pegada a las cuerdas de un requinto.

Su esfuerzo la convirtió en una destacada música y hoy es considerada la reina del requinto en Chitagá.

El arte lo combina con su profesión de ingeniera civil, carrera que está a punto de terminar.

Nació en Pamplona, pero pasó su niñez en la vereda Llano Grande, en donde aprendió a garabatear las primeras letras.De allí, la familia se fue a vivir a Chitagá, y ella siguió ligada a esa zona rural en donde aprendió a puntear melodías con el instrumento del cual no se ha querido desprender.

“Cuanto alcanzaba los nueve años, empecé a tocar. Me acuerdo que mientras mis compañeritos jugaban, yo estaba sentada aprendiendo las notas musicales”, sostuvo.

Esta labor la desarrollaba después de que llegaba de la escuela y tenía como profesor a su papá, Manuel Moreno, quien fue el que le inculcó el arte musical.

Con muy poco tiempo de disponer del requinto, ya tocaba La múcura. Logró conformar a los 12 años el grupo musical Sol Naciente con la hermana Diana Alexandra, los primos Miguel Ángel y Johana Tarazona Moreno.

Para hacerlo más atractivo, bailaban y hasta tenían coreografía cuando se presentaban en los festivales de música campesina de los municipios de la Provincia de Pamplona.

En este tiempo ganaron en Chitagá el primer concurso de murgas campesinas en honor al músico Patricio Alfonso Villamizar.

Con parte de la plata que recibió como premio, logró comprar el requinto con el que aprendió a tocar, y que todavía conserva.

Los merengues campesinos como 'Dime por qué', 'El Marinero' y 'La Canoa' eran los temas que más sensación causaban en las presentaciones.

Después de que recibió el título de bachiller, en Chitagá, el grupo se desintegró por razón de los estudios universitarios.

Pero ella decidió volver a tocar el requinto al lado de su padre. Lo hacen en presentaciones públicas y privadas, como una manera de contribuir al fomento de la música campesina.

“En Chitagá y en donde voy causa curiosidad al ver a una mujer concentrada sacándole notas a ese instrumento. Es por eso que me dicen y me anuncian en las intervención como la reina del requinto”.