La sustitución de coca por otros cultivos en el corregimiento de Pacelli (Tibú) solo depende de un factor: confianza en el Gobierno Nacional.

Así lo dio a conocer Gerson Villamizar, representante de Asojuntas de la zona, quien expresó que pese a que existe voluntad de cambiar de actividad por parte de más de 800 familias que se dedican al cultivo, los incumplimientos históricos merman cualquier posibilidad.

De hecho, los habitantes recuerdan con amargura lo que ocurrió con el Plan Colombia, cuando no quedó nada más que promesas.

Según Villamizar, en ese entonces, “Pacelli erradicó en ocho días toda la coca que había en el corregimiento, que correspondía a unas 400 hectáreas”.

Pero aunque Pacelli le cumplió al Gobierno, los subsidios que se entregarían apenas duraron seis meses, y luego nadie volvió con las ayudas, mientras se perdía lo cultivado para reemplazar la coca.

Por eso, la comunidad reinició la siembra de coca, de la cual hoy depende el 80 por ciento de una población que suma 1.200 familias.

“Ya no se quiere repetir esa historia”, señala el líder comunal, quien lleva consigo el mensaje de los pobladores: pruebas del Gobierno para dar el ‘sí’ a la sustitución.

“Ellos quieren cambiar y sustituir”, afirma. “Por eso se trabaja en detalle en la revisión de lo que se plantea para la sustitución, para llegar a los acuerdos en bloque”, afirma.

Pero aunque la falta de inversión genera desconfianza, y la comunidad está “defraudada”, Villamizar destaca el trabajo comunitario que no cesa, desde la elaboración del plan de desarrollo sostenible 2015-2024.

En este sentido, resaltan los proyectos que pretenden convertirse en modelo nacional, por la fortaleza asociativa de la comunidad.

“La coca es como lo único negativo allá, porque la organización social, la calidad humana, y la productividad con cacao en la zona baja, ganadería y otros cultivos, son lo que nos enorgullece”, dice.

Sin embargo, el principal obstáculo para la producir es la varibilidad de precios, razón por la cual le propondrían al Gobierno negociar un precio fijo para los productores de Pacelli.

Si esto no ocurre, seguirán en la siembra de cultivos alternativos, potreros para el ganado, gallinas ponedoras, y trabajando con las asociaciones existentes, como las de jóvenes, tecnólogos, cañicultores, entre otras.

“Ojalá se pueda dialogar con el Gobierno, si no, pues no vamos a recurrir a acciones de hecho, ni nada por el estilo”, dice el líder. “No hemos salido a paros porque estamos como siempre: esperando que las cosas se den”.

Detalles del plan piloto

Según el Plan piloto de Pacelli, ya están acordados los proyectos productivos, con miras a 2024, entre los que están:

Montaje de 20 granjas integrales agroecológicas que se conviertan en unidades empresariales campesinas, para sustituir actividades ilícitas y aprovechar las aptitudes productivas de los habitantes.

Establecer 20 parcelas cacaoteras sostenibles para ampliar la base empresarial del corregimiento, en concordancia con las apuestas productivas de los habitantes y la vocación del suelo.

Consolidar un centro de fomento agropecuario que incorpore el conocimiento y la innovación en el campo, con transferencia tecnológica.

Plantear rutas para clarificar y formalizar la propiedad rural y resolver los conflictos patrimoniales existentes.