Un total de 74 exrecolectores de hoja de coca de Caño Indio (Tibú) serán contratados para vincularse al Programa Nacional de Sustitución de Cultivos Ilícitos (Pnis), con el fin de que apoyen los proyectos productivos que se establecerán en la zona y sean los encargados de ejecutar las obras comunitarias que se desarrollarán allí, en su mayoría vías terciarias, que serán definidas por los habitantes.

Pedro Barón, coordinador del Pnis para Norte de Santander, explicó que los antiguos recolectores recibirán un pago mensual de un millón de pesos, durante un año, más la seguridad social y riesgos laborales, para cumplir con su trabajo.

La tarea incluirá además el compromiso de estudiar, al menos una vez por semana, y aprender técnicas propias de los temas agropecuario y agroindustrial que se prevé desarrollar en el núcleo veredal.

Según se acordó en asamblea comunitaria, la junta comunal del sector será la encargada de administrar los recursos de los recolectores, previamente verificados y reconocidos por la comunidad.

De otro lado, Barón explicó que el programa aspira a sumar a los procesos de sustitución unas 2 mil familias más, en los próximos meses, y cerca de 1.500 en Sardinata.

En esta última localidad, esta semana se abrirá la convocatoria para contratar la asistencia técnica que acompañará los proyectos productivos, mientras que los días 13 y 14 de abril se realizará el encuentro municipal de sustitución para que las familias se unan al Pnis y salgan de la actividad cocalera.

Por otra parte, Barón reiteró que en los municipios de Convención, El Carmen, Teorama, Hacarí y San Calixto se busca hacer una inversión integral, a través de la Agencia de Desarrollo Rural, en vista de la presencia de al menos 60 organizaciones activas de productores de cultivos lícitos que también serán apoyados para contribuir con la paz regional.