La falta de infraestructura en las instalaciones educativas del sector rural en Norte de Santander sigue siendo un tema que por años ha prevalecido y que poca atención ha recibido por parte de las autoridades de la región, afectando directamente la educación de los niños de estas zonas.

Vanesa Velázquez, habitante de la vereda de Los Ángeles, corregimiento de la Merced, en Sardinata, denunció que la desatención afecta al centro educativo El Recreo,  que la misma comunidad con esfuerzo propio construyó y que hoy no está en las mejores condiciones.

Según señala Velázquez, la escuela fue construida con tablas, pero, con el pasar del tiempo, la exposición a la lluvia y al sol, al igual que por la acción de las polillas, la madera se está pudriendo.

Pero como los recursos económicos no alcanzaron, fue imposible dotarla de baños, razón por la cual los estudiantes deben hacer sus necesidades fisiológicas al aire libre.

Esta limitación en especial, representa un grave problema al momento de que los niños tengan que volver a clases presenciales y deban cumplir con estándares mínimos de higiene como el lavado de manos para evitar el contagio de coronavirus porque  no tienen acceso a este servicio.

La denunciante señaló que los espacios recreativos son inexistentes, el suelo es de tierra y los techos de zinc de los salones están gravemente dañados por los fuertes vientos.

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A esta problemática se suma que la vereda Los Ángeles no tiene acueducto ni  electricidad.

Vanesa Velázquez en representación de la comunidad les pidió a la administración municipal de Sardinata, a la Gobernación de Norte de Santander, a la Secretaría de Educación departamental y al Gobierno Nacional, que fijen sus ojos en esta zona que desde hace años sufre del abandono estatal.

Los padres de familia reclamaron que se les conceda a sus hijos un espacio digno para el aprendizaje en donde puedan retornar a clases el año entrante en una institución con instalaciones de calidad.

Por su parte, la Secretaría de Educación del Departamento, mencionó que desde esta dependencia se está haciendo la gestión para ver qué organismo puede ayudar con una intervención en esa zona de Sardinata.

Sin embargo, la entidad recalcó que es importante tener en cuenta que cualquier acción que se vaya a adelantar, debe priorizarse, es decir, sí es necesaria la intervención en la infraestructura, pero como ahora los niños no están asistiendo de manera presencial en la sede, no es prioritaria, puesto que en el momento lo importante es garantizar que la educación llegue a sus casas, como consecuencia de la emergencia sanitaria.