Dicen que en cada viejo hay un niño que despierta en la vejez de las arrugas, y que en cada niño hay un hombre con ganas de explorar el mundo. Por eso, en Chitagá le apuestan a la lectura para transportar en las letras a los más pequeños y los más grandes.

A los pupitres de los niños que corren en busca de sus jornadas académicas del municipio están llegando los libros para incentivar la importancia de la lectura desde las zonas rurales.

Con el proyecto El Campo de la Lectura se benefician 250 niños campesinos, a través de talleres y actividades lúdicas motivacionales. 

La directora de cultura, Jessica Conde, manifestó que el proyecto es concertado con el Ministerio de Cultura.

A los sectores rurales llegan promotores que se encargan de realizar talleres y actividades lúdicas, que les permiten a las comunidades tener acceso a los servicios ofrecidos por la biblioteca pública Edgar Horacio Albarracín Camargo.

Además, realizan actividades de integración en los que los estudiantes y demás actores involucrados en el proceso leen en voz alta y comparten las experiencias aprendidas.

Entre las zonas objeto del proceso de lectura con los niños de primaria están La Palmera, El Delirio, Burgua, La Laguna,  Siagá, Presidente, Hato Grande, Piedras, El Carbón, Casa Vieja, Bartaqui, Alto Viento, Tapurcua, Carrillo, Quicuyes y Llano Grande.

Asimismo, se promociona la lectura entre los usuarios de las unidades de atención a la primera infancia de la estrategia de cero a siempre del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) y de quienes hacen parte del proyecto Ser Humano.

“De esta manera, los estudiantes tienen derecho a disfrutar de un buen libro, al igual que a tener acceso a nuevos conocimientos y a la información”, precisó Conde.

El proyecto fue presentando por la Alcaldía al Ministerio de Cultura, y para él se concertó un aporte de 18 millones de pesos.

El municipio se vincula con la contratación de tres formadores que están encargados de llevar el programa El Campo de la Lectura a los centros educativos rurales.

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Los cuentos de mi abuelo

Por otra parte, las historias y tradiciones de Chitagá que se resguardan la memoria de los abuelos y transmiten en cada relato a los más jóvenes, se recopilará en el proyecto Los Cuentos de Mi Abuelo.

Historias como la estadía del Libertador Simón Bolívar en la Casa Colonial o el dominio de los chitareros en las zonas de Tunja serán plasmados en un libro que conserve las tradiciones orales. 

Mitos, leyendas, poesías, cuentos, narraciones y relatos sobre los sitios turísticos como el Puente Real, el páramo de El Almorzadero y la Laguna El Salado exaltarán las bellezas naturales del municipio.  

El proceso se adelanta a través de conservatorios con los adultos mayores. 

Una apuesta para conservar el patrimonio cultural de los chitagüenses, que buscan revivir a través de la lectura las tradiciones de la historia municipal y conservarlas en el presente, lejos del olvido.