Las acciones violentas del EPL en la región del Catatumbo llevaron a la Defensoría del Pueblo a exigir respeto por los derechos fundamentales de los civiles, así como celeridad de las autoridades en su respuesta humanitaria.

El camión con cilindros de gas atravesado en una vía de San Calixto, que interrumpió el tránsito de la población y desplazó a 25 familias es uno de los hechos mencionados por la entidad.

“Por la gravedad y urgencia requiere la intervención inmediata del Estado. Es inexplicable que tras cinco días las autoridades no hayan adoptado medidas al respecto”, dijo la entidad.

Así mismo, se mencionaron los incidentes con 10 tractomulas con grafitis del EPL en la vía Ocaña-Cúcuta, y la ambulancia del hospital de Ocaña, usada como carro bomba, situación que infringe el Derecho Internacional Humanitario.

“La Defensoría del Pueblo urge la acción inmediata de las autoridades y el restablecimiento del orden público en la zona que permita la garantía del pleno y libre ejercicio de los derechos fundamentales de los pobladores de la subregión del Catatumbo”, agregó.

El gobernador William Villamizar dijo que lo ocurrido “es preocupante” pero solo manifestó que “el accionar de los grupos delincuenciales es impredecible”.

Por su parte, el procurador regional Juan Carlos Bautista también criticó la falta de control y ausencia de políticas estructurales de seguridad, control migratorio e inversión social, para “mitigar la violencia presentada en nuestro territorio, ya que es muy diciente que a menos de 24 horas de la presencia del viceministro Aníbal Fernández de Soto se presenten hechos terroristas en la capital departamento y en la provincia de Ocaña”.