Educar para el respeto de los derechos y promover la protección de los estudiantes dentro de las escuelas fueron algunas de las directrices definidas en el Comité Departamental de Convivencia Escolar, efectuado en la Gobernación.
En el encuentro, al que asistieron representantes de los docentes de la región, delegados de la Gobernación y otras instituciones, se insistió en la urgencia de lograr que los estudiantes tengan un goce efectivo de sus derechos, y no solo de sus necesidades básicas insatisfechas.
En este sentido, la Secretaría de Gobierno señaló que no basta, por ejemplo, con entregar alimentación escolar si no se solucionan integralmente los problemas escolares y de las familias, los cuales favorecen la vulneración y el matoneo.
Se agregó que el derecho a la educación implica más que enseñar y aprender, o imponer premios y castigos, sino que se debe procurar que los elementos normativos faciliten la vida en comunidad y la convivencia.
Así mismo, se pidió evaluar las situaciones de matoneo y maltrato que se presentan en las instituciones, para determinar resposabilidades y evaluar las circunstancias que hacen más vulnerable a un niño de ser objeto de ataques escolares.
Se enfatizó además en promover la igualdad real y efectiva, y en entender que las decisiones que se tomen en los colegios deben favorecer que, quienes no están condiciones de igualdad, la logren.
Aunque en la reunión se habló de la polémica por la diversidad sexual, también se hizo referencia a los casos de discriminación religiosa, o discapacidad cognitiva y física, y las barreras históricas que aún se deben romper para que los estudiantes en estas condiciones tengan accceso a una educación incluyente, diversa y en la que prime el respeto a la diferencia.
La Opinión