El Ejército de Liberación Nacional (Eln) anunció un paro armado para el próximo viernes y por 72 horas en todo el país, pero el Catatumbo vive una ola violencia desde hace más de una semana por cuenta de los enfrentamientos en grupos ilegales.
Al desplazamiento de campesinos en Ábrego, por los choques entre el Eln y el reducto del Ejército Popular de Liberación (Epl), y a las acciones violentas en Hacarí se suma la situación que se vive en las últimas horas en San Calixto, en donde una vivienda de la vereda Piletas recibió 30 disparos en medio de la confrontación entre las organizaciones armadas.
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El personero José Luis Franco, quien la mañana de este martes participó junto a otras autoridades en un Consejo de Seguridad, se movilizó hasta esa zona rural para conocer el estado de la familia afectada y los daños causados. Afortunadamente no hubo heridos.
Precisó que en la vivienda, en cuyas paredes están las huellas del conflicto armado que azota a los habitantes del Catatumbo, había dos niños de entre los 5 y 7 años, dos mujeres y un hombre.
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Franco también señaló que desde hace varios días no hay clases en la zona rural de San Calixto, debido a los campos minados que fueron colocados cerca a las escuelas.
Igualmente se conoció que en el Catatumbo están paralizadas las misiones médicas por el creciente accionar de grupos armados.