Luego de evaluar la localización de los lotes para la construcción provisional de una estación de policía en Gramalote, se definió que la solución más inmediata y práctica será tomar en arriendo una manzana para los uniformados.

En total son cuatro viviendas ubicadas a un costado de la plaza principal, de las cuales tres propietarios ya dieron su visto bueno, y esta semana el alcalde Tarcisio Celis será el encargado de acordar con el cuarto dueño, las condiciones para que se logre tomar en arriendo el inmueble.

Según Carlos Rodríguez, coordinador de la reconstrucción del pueblo por parte de la Gobernación, la cuarta vivienda serviría para que las autoridades desarrollen actividades administrativas.

Con esto, la alcaldía ya no tendría que disponer de espacio en el Centro Administrativo Municipal, y se daría el beneficio económico a uno de los pobladores.

“La Policía llevó el personal experto en temas de diseño y seguridad, para analizar la visibilidad y otras necesidades”, dijo el funcionario. 

Uno de los requerimientos de la Policía está relacionado con el albergue de los uniformados y la adecuación de un servicio sanitario adicional, para lo cual se harían algunas modificaciones a las viviendas.

Si bien la idea en el pueblo es que los cambios estructurales no sean mayores, para este caso únicamente se construiría un baño adicional en cada casa, es decir, las viviendas quedarían con dos baños, para cuando se termine el contrato con la Policía.

“Para intervenir las viviendas se está evaluando cuánto sería el recurso por invertir, y definir cuál entidad se encargaría de la ejecución”, agregó.

En materia de los costos del arriendo, se estima que no superen los 400 mil pesos por casa, mientras se construye el Distrito, en lo cual se calcula un año de obra.