Todos los bomberos de Norte de Santander se declararon en estado de máxima alerta ante el recalentamiento del clima y los pronósticos de la entrada en vigencia del fenómeno de El Niño dados a conocer por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).

Estas condiciones obligaron también a las autoridades ambientales regionales a poner en práctica medidas de choque para estar preparados ante una eventual sequía y las altas temperaturas que se derivan del fenómeno climático.

Una primera medida de la Gobernación de Norte de Santander a través del Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres (Cdgrd) fue la de hacer uso racional del agua, tanto en el consumo como en las actividades comerciales y agrícolas.

Hay que tener en cuenta que el fenómeno de El Niño se presenta con  disminución plena de las lluvias y el aumento de las temperatura, lo cual incide en el descenso de los niveles de los ríos y la amenaza de incendios forestales, dijo la directora del Cdgrd, Adriana Milena Arias Carrillo.

El Ideam confirmó El Niño hasta marzo.

La funcionaria consideró importante que aquellos agricultores, especialmente los ubicados en las zonas bajas de las cuencas de los ríos, tengan en cuenta la reducción en la oferta hídrica, las temperaturas altas del aire, el bajo contenido de humedad en el suelo y en la cobertura vegetal, además el descenso en los niveles de los ríos.

Para tener en cuenta

De la misma manera recomendó planificar adecuadamente las actividades agrícolas y pecuarias. Ante las posibles condiciones de déficit hídrico, sugirió:

1. No hacer fogatas en lugares de cobertura vegetal.

2. No arrojar colillas de cigarrillo encendidas, en lugares con cobertura vegetal.

3. No exponerse al sol en los horarios de 8 a.m. 12 m. y de 1 a 4 p.m., que es cuando  hay mayor cantidad de radiación ultravioleta. 

 4. Hacer un uso eficiente y ahorrativo de agua y energía en los hogares.

 5. Hacer manejo adecuado de residuos sólidos, para evitar la contaminación de las fuentes hídricas. Manejar adecuadamente la quema de basuras en fincas y potreros, en lo posible evitarlas, para prevenir la ocurrencia de incendios forestales.

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La zona de la Avenida del Río es una de las más propensas a las quemas de vegetación.

Hay que evitar las quemas

De cada cinco incendios diarios en Cúcuta, cuatro son forestales y uno es estructural. Los estructurales son los que se desatan en las viviendas. Los forestales corresponden a la vegetación que se quema, aunque también se producen en lotes baldíos.

Lo más común en Cúcuta es en los lotes desocupados y a lo largo de la ribera del río Pamplonita, sobre todo por los lados del puente Enrique Cuadros Corredor (La Gazapa), donde históricamente se producen quemas peligrosas.

El comandante del Cuerpo de Bomberos de Cúcuta, teniente Carlos Monsalve, explicó que los incendios forestales atacan y destruyen la flora y la fauna, y hasta pueden ocasionar pérdida de vidas humanas cuando se salen de control.

Por eso, dijo el socorrista, entre todos debemos evitar que se produzcan.