Villa del Rosario se salvó de una eventual emergencia de origen baceteriano, cuando autoridades sanitarias sacaron del río Táchira unos 20 costales con restos de pollos y bovinos o equinos sacrificados.

El hallazgo ocurrió a solo 10 metros del centro de captación que hace la empresa de acueducto de Villa del Rosario, Eicviro E.S.P.

Los restos de animales suelen contaminarse con bacterias que pueden desatar una epidemia de salmonelosis, con serias consecuencias como intoxicaciones o infecciones intestinales. También puede surgir un brote de tifoidea o enfermedades producidas por E. Coli.

Según Jenny Moreno, coordinadora de producción y calidad de Eicviro E.S.P. este año es la segunda vez que encuentran estos restos, lo que resulta inusual, porque la frontera con Venezuela, de donde llega carne y pollo de contrabando, está cerrada.

“Dejan bultos en la ladera del río con plumas y desechos de gallina más arriba de la bocatoma. Hoy, de manera inusual, también encontramos patas de reses”, dijo Moreno. “Ya hemos hecho denuncias a Corponor y a la Procuraduría de control ambiental, e informamos a  la secretaria de Salud del municipio”.

Moreno dijo que es urgente revisar el estado ecológico del río, que está bastante deteriorado, y que se vigile para que no arrojen más restos orgánicos.

*La Opinión