El inconformismo por la presunta instalación de un peaje en la vía Cúcuta-Ocaña fue resuelto por el director territorial del Invías, Jesús Vergel, quien explicó que lo que se hizo fue presentar “un estudio y no la decisión de instalar un peaje”.

Hasta ahora, según el funcionario, “no hay afán de ubicar ese peaje” dado que “la discusión está abierta  para evaluar qué tan conveniente sería instalarlo o no, pero la decisión depende del Ministerio de Transporte”.

El mencionado estudio define: ubicación, tipo de peaje, y valor estimado de recaudo.

En el primer aspecto, Vergel explicó que se condicionó a no ubicarlo entre Ábrego y Ocaña ni entre Sardinata y El Zulia, porque quienes deben aportar son aquellos que cumplen la totalidad el viaje.
 
De ahí que la ubicación sería en el kilómetro 124 de la ruta Ocaña-Sardinata, es decir, entre La Sanjuana y la entrada de Sardinata, con un recaudo anual de casi 7 mil millones de pesos.

Aunque la discusión no está cerrada, Vergel señaló que la instalación sí sería conveniente para hacer mantenimiento al corredor, y evitar su deterioro.

Además, se requeriría  una estación de pesaje para evitar que los transportadores excedan la carga máxima permitida, situación que se presenta en la actualidad, con más de 52 toneladas, en especial con las cargas del carbón.

El funcionario aclaró además que este proyecto es diferente de los estudios que adelantó la ANI y estructuró la concesión Ocaña-Cúcuta en la que hay tres peajes: entre Ábrego y Ocaña, El Zulia y Cúcuta, y un peaje tunelero, en el Alto del Pozo.

“Hay preocupación porque se cree que si instalamos el peaje, cuando venga la concesión se va a sumar, pero está claro que cuando eso se dé, tendrán que quitar ese peaje y trasladarlo a los otros sitios que señala el estudio”, enfatizó.