Luego de la decisión de la Corte Constitucional de avalar el blindaje jurídico del acuerdo de paz suscrito entre el Gobierno y las Farc, el Centro Democrático, principal opositor de lo pactado, empezó a moverse con el fin de cumplir su propósito de dejar sin piso lo que se firmó en La Habana.

Una de las principales tareas que se trazaron los congresistas de la colectividad fue recolectar 1,7 millones de firmas  que se requieren para solicitar la convocatoria a un referendo que derogue lo acordado con la desaparecida guerrilla.

Para tal fin, la Registraduría ya le dio vía libre al comité que se encargará de recolectar los apoyos y el miércoles mismo los formularios fueron colgados en la página web del partido, así como en las redes sociales, para quienes quieran participar del proceso.

Hace dos semanas, las senadoras Paloma Valencia y Paola Holguín, además del representante a la Cámara Álvaro Hernán Prada inscribieron el comité ciudadano ante la organización electoral, y argumentaron que la idea de un referendo derogatorio está sustentada en tres aspectos fundamentales:

• Revocar la Jurisdicción Especial para la Paz.
• Acabar con el blindaje jurídico de los acuerdos de paz .
• Impedir la representación política de los guerrilleros que hayan cometido crímenes de lesa humanidad.

Los tres congresistas señalaron que tendrán seis meses para recoger las rúbricas y advirtieron que para ello irán a diferentes regiones del país.

“Esperemos que con estas firmas podamos convocar el referendo para que los colombianos tengamos, esta vez sí, la última palabra”, manifestó la también precandidata presidencial, Paloma Valencia.

Pese a las críticas en las que ha insistido el uribismo contra lo pactado en Cuba, la Corte Constitucional señaló que el Acto Legislativo 02 de 2017 no sustituye la Constitución y reiteró que aunque el Acuerdo Final no es la única forma de concretar el valor y el derecho a la paz, sí constituye un instrumento en esa dirección.