El expresidente Álvaro Uribe aseguró que su sucesor, Juan Manuel Santos, estuvo relacionado con la decisión que tomó la Corte Suprema de Justicia de ordenar medida de aseguramiento en su contra por el caso de falsos testigos. 

En entrevista con las periodistas Vicky Dávila y María Isabel Rueda para la Revista Semana, Uribe indicó que considera que Santos sí  tiene relación con el proceso que adelanta la Corte Suprema en su contra, pero que el hecho es “irrelevante” en este momento. Advirtió que el alto tribunal está politizado. 

“No me dejaron defender en libertad por un sesgo político. Cuando ustedes miran las 1.544 páginas de ese auto, ustedes ven que, por ejemplo, que  desconocen lo que es cierto: una interceptación ilegal y dolosa”, señaló el senador del Centro Democrático.

Uribe aseguró que se siente secuestrado por estar cumpliendo la medida de aseguramiento domiciliaria ordenada por la Corte Suprema de Justicia  y añadió que lo que está pasando le duele por su familia y los colombianos.

Agregó que está secuestrado por mentiras  y los sesgos del alto tribunal. 

“¿Cómo así que el doctor (Luis) Barceló cuando se probó que una ONG , que dice  que es para defender presos políticos le dio alrededor de 12 millones de pesos al testigo  Monsalve ¿ Ustedes saben quién contribuye a esa ONG y es muy amigo de ellos : el senador Cepeda de FARC. Haya pruebas de que les ha dado más de 29 millones en aportes y esa ONG  le da ese dinero a la familia de Juan Guillermo Monsalve”, dijo el expresidente. 

Según Uribe en el marco del proceso se le han violado las garantías procesales y aseguró que por esta razón es necesario realizar una reforma al sistema de elección de magistrados se la Corte Suprema de Justicia.

De igual forma, el senador reiteró que el exparamilitar Juan Guillermo Monsalve, uno de los testigos en su contra, ha cambiado su versión en  múltiples ocasiones. 

La Corte Suprema de Justicia en su providencia asegura que el senador tenía conocimiento de las actuaciones que adelantaba su exabogado Diego Cadena, quien  de acuerdo a la Fiscalía, ofreció alrededor de 200 millones de pesos a exparamilitares para que testificaran a favor del expresidente. 

Uribe reiteró que no conocía los movimientos de si entonces abogado.