Mientras la expectativa crece en el país por cuenta de la continuidad o no de los diálogos de paz con el Eln, desde el Gobierno Nacional insistieron este jueves en poner condiciones a los jefes de esa guerrilla para destrabar las conversaciones e intentar llegar a un acuerdo definitivo.

Durante un encuentro con los integrantes del Comité Permanente del Episcopado Colombiano, el alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, dijo que antes de cualquier determinación, el Comando Central del grupo armado debe aclarar cuál es su presencia en Venezuela y dónde están los secuestrados que tienen en su poder desde el 2002.

“Ese es un punto que debe aclarar muy bien esa organización, porque es imposible llegar a considerar un cese al fuego, cuando parte de la tropa o de sus miembros está en un país ajeno”, dijo Ceballos, en relación a la presencia del Eln en el vecino país.

El alto comisionado sostuvo que los colombianos pueden estar tranquilos, porque la evaluación de la mesa de diálogos instalada en Cuba se ha desarrollado de manera seria y se han tenido en cuenta los elementos necesarios para que en Colombia “haya paz con legalidad”.

Por su parte, los delegados del Ejército de Liberación Nacional le volvieron a enviar un mensaje al presidente Iván Duque, en el que reiteran la importancia de reanudar las conversaciones y le piden que así como exige, también haga ofertas.

“Hay una hoja de ruta trazada muy precisa, unos avances y unos puntos de llegada muy precisos. Esperamos seguir avanzando, reanudar las conversaciones con el gobierno de Duque y que toda la participación de la sociedad siga siendo protagónica”, señaló el jefe negociador del Eln, Pablo Beltrán, en un comunicado difundido en video.

En medio de la incertidumbre que existe, la Iglesia católica propuso que los diálogos se trasladen a Colombia, con el fin de que la negociación sea más directa entre las partes y no tenga interferencias.