Hace apenas una semana el secretario de Gobierno municipal, Francisco Javier Cuadros, celebraba el haber superado la moción de censura mediante la cual las mayorías del Concejo intentaron apartarlo del cargo por el presunto manejo irregular del espacio público, lo cual fue considerado como una victoria de la administración municipal. 

Este viernes, sin embargo, de manera sorpresiva, el funcionario anunció que no va más en el gabinete de Jairo Yáñez.

“He tomado la decisión de renunciar como secretario de Gobierno de la ciudad de Cúcuta. Agradezco a Dios, a mi familia, al señor alcalde, a la ciudadanía y al equipo de trabajo por permitirme servir. Contarán conmigo desde cualquier lugar para hacer de #CúcutaUnaEstrategiaDeTodos”, fue el mensaje que escribió el funcionario en su cuenta de Twitter.

La decisión de Cuadros generó todavía más inquietud, pues unas horas antes de oficializar su dimisión, había hecho público un comunicado en el que señalaba que le pidió a la Procuraduría Provincial de Cúcuta revisar los contratos suscritos por su despacho durante las dos primeras semanas de noviembre, con el fin de que se aclare si sobre estos pesa alguna duda.

Y es que como se recuerda, el secretario de Gobierno terminó cuestionado el fin de semana pasado, tras la votación de la moción, pues algunos concejales denunciaron que, previo a que se decidiera su continuidad en el gobierno local, el despacho que dirige adelantó una millonaria contratación.

Ante la plenaria, el concejal Alejandro Castellanos aseguró que la Secretaría de Gobierno dejó adjudicados 32 contratos, principalmente de prestación de servicios, como antesala a la votación de la moción. Los cabildantes denunciaron que los mismos tenían como fecha de acta de inicio el viernes 13 de noviembre.

“El 12 de noviembre, dos días antes de la moción de censura, se firman 30 contratos OPS entre la 1:50 y las 2:34 p.m., ¿si eso no es corrupción, tráfico de influencias o constreñimiento, eso qué es?”, cuestionó ese día otro de los concejales del bloque mayoritario.

En vista del ruido que esto generó y de los cuestionamientos de los que terminó siendo objeto la administración de Jairo Yáñez, pues algunos compararon lo ocurrido en el despacho de Gobierno con las movidas de Francisco Cortés la madrugada del 2 de enero, cuando dejó listos más de 30 contratos por $1.700 millones antes de dejar el cargo del cual fue destituido, Cuadros decidió poner el paquete de contratos bajo la lupa del Ministerio Público.

“Desde que se generó el cuestionamiento he dicho a medios de comunicación y a la ciudadanía que estos corresponden a procesos que están previstos en el Plan de Desarrollo vigente y el Plan Anual de Adquisiciones. Sin embargo, decidí reforzar el propósito de superar cualquier duda o cuestionamiento, enviando todas las copias de los procesos contractuales a la Procuraduría Provincial. Esto lo hice mediante oficio el día de ayer (jueves) 19 de noviembre de 2020”, señaló.

El sábado pasado, tras el debate en el Concejo, Cuadros había defendido ya el proceso de contratación que fue objeto de discusión.

“Todos los procesos contractuales no nos los inventamos de la noche a la mañana por una coyuntura, los procesos contractuales se planean, se organizan, de acuerdo a proyectos de inversión y demás. Entonces, no tiene ningún sustento que se quieran utilizar argumentos contrarios a que ganamos en ideas. La calumnia y la mentira no pueden volverse rutina del debate público en la ciudad”, sostuvo el funcionario.

Contratos y una posible suspensión, el detonante

Aunque ni en su carta de dimisión ni en los mensajes mediante los cuales le informó a la opinión pública la decisión de dejar la Secretaría de Gobierno, Francisco Javier Cuadros se refirió a los motivos que lo llevaron a hacerlo, La Opinión conoció que la polémica que generó esta contratación, de una u otra forma sí terminó forzando su salida del cargo.

“El tema de los 32 contratos tenía muy disgustado al alcalde, pues aunque él (Cuadros) sí había manifestado que necesitaba un equipo de apoyo para las labores que vienen desarrollando, no sabían que lo iban a hacer en momentos en que estaba en discusión la moción y tantos contratos de una vez”, le contó a La Opinión un concejal.

El otro factor que habría llevado al funcionario a dejar la Secretaría, es la inminente suspensión de la que iba a ser objeto por parte de la Personería Municipal, que este año ya ha apartado temporalmente de sus funciones a varios integrantes del gabinete de Yáñez.

El propio Cuadros dejó entrever en el comunicado expedido ayer en la mañana que un escenario en ese sentido estaba por suceder, por cuanto solicitó que se tuviera en cuenta el poder preferente ante otra investigación que pudiera estar adelantando alguna entidad del nivel municipal y provincial por el mismo caso de los contratos. 

“Que sean los órganos competentes los que revisen en detalle todo proceso y se aclare todo, las dudas y cuestionamientos”, dijo.

Al ser consultado sobre esta nueva renuncia en su gabinete y si la salida obedeció a la controversia suscitada en torno a los contratos, el alcalde Jairo Yáñez solo dijo que el funcionario tomó la decisión de manera voluntaria.

“Hay que respetar el sentir de él. El mejor recuerdo por las funciones de una persona que dedicó prácticamente un año de trabajo, con las normales diferencias de criterio, de estilo muchas veces, pero todos los seres humanos no somos iguales. Esta es la dinámica de los gobiernos. El único que tiene asegurados los cuatro años, aparentemente, es el alcalde”, dijo, 

Francisco Javier Cuadros, por su parte, no se volvió a referir más al asunto de la contratación.