La que esperaba ser una sesión del Congreso de la República en solidaridad con las comunidades indígenas y la población del Cauca, y que se realizaría este martes en esa región, terminó en polémica al interior del Senado y la Cámara de Representantes por diferentes motivos. 

En primer lugar, desde el Senado, su presidente Lidio García, le reclamó al Gobierno Nacional que no está dando las medidas de seguridad adecuadas para que su corporación pueda sesionar el martes en Santander de Quilichao, Cauca. 

“Con el objetivo de escuchar de primera mano y conocer la situación del conflicto que se vive en Santander de Quilichao, Cauca, la plenaria del Senado acordó efectuar un encuentro mañana martes en la mencionada población. Consultas adelantadas por la mesa directiva con las autoridades indican que el proceso de seguridad y logística para llevar a cabo la plenaria en Santander de Quilichao no están dadas, pues todos los esfuerzos de nuestra Fuerza Pública giran alrededor de las marchas y el paro del 21 de noviembre”, indicó García en un comunicado. 

Precisó el dignatario del Senado que pese a situación, “cada senador podrá asistir, evaluando la situación y bajo su propia responsabilidad”. 

Mientras tanto, en la Cámara de Representantes la situación que se dio es que el presidente, Carlos Cuenca, manifestó que la corporación no tiene los recursos para poder financiar el desplazamiento de los 171 representantes y demás personal que se requiere para que se dé la sesión el martes en esa población caucana. 

Sin embargo, esa determinación fue cuestionada por la actual segunda vicepresidente, María José Pizarro, quien sostiene que la sesión lo que busca es “escuchar a las comunidades, pero también escuchar al Gobierno y a las autoridades de la región para saber qué tipo de propuestas están planteando y solucionar el tema de la crisis humanitaria y de violencia que se está viviendo en esta región”. 

Incluso manifestó que "se tienen que solucionar los temas logísticos para trasladar a todo el Congreso. Creemos que no es solo la comisión de paz, sino que son representantes de todas las bancadas, además solo hubo 5 votos en contra para acompañar y realizar esta sesión, es un asunto que nos convoca a todos y por lo tanto requiere soluciones conjuntas no solamente de la comisión de paz, aquí el tema ya ha trascendido”. 

Según Pizarro, “haremos todo lo legalmente requerido para poder reabrir y materializar el hecho de que la Cámara de Representantes viaje a Santander de Quilichao a escuchar a las comunidades. Nos dejaría muy mal parados el hecho de no viajar como se tenía previsto”. 

El presidente Cuenca sí precisó que se autorizará el viaje pero de una comisión de máximo 20 representantes, pero no de toda la corporación, en especial irán los integrantes de la Comisión de Paz. 

Para la sesión especial están citados la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, además el procurador general de la Nación, Fernando Carrillo, el defensor del Pueblo, Carlos Negret, al alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Alberto Brunori, y la OEA.