El obispo de Tibú, monseñor Omar Alberto Sánchez, quien conoce de cerca la crudeza del conflicto en la zona del Catatumbo y las secuelas que ha dejado la guerra entre las comunidades de esta golpeada región de Norte de Santander, hará parte del Consejo Episcopal de Paz que acompañará el proceso de diálogos con el Eln.

Si bien, la Iglesia Católica no hará parte activa de la mesa de conversaciones con esa guerrilla, que está próxima a instalarse en Ecuador, sí aspira a jugar un papel fundamental en el proceso y estará presta a facilitar las labores que así  le soliciten las partes.

Como es sabido, ellos han participado ya en los diálogos exploratorios que permitieron avanzar hacia la fase pública de la negociación. 

Junto al obispo de Tibú estarán en el Consejo, los prelados de Cali, monseñor Darío Monsalve; Quibdó, Juan Carlos Barreto; Istmina (Chocó), Julio Hernando García; y de Arauca, Jaime Muñoz, todos con presencia en zonas que han sido duramente golpeadas por la presencia de actores armados ilegales.