Dicen que la tercera es la vencida y esta, al parecer, es la consigna con la que el ahora exsecretario de Hacienda del departamento, Martín Martínez Valero, decidió lanzarse al ruedo nuevamente, en busca de la Gobernación de Norte de Santander.

La posibilidad de que el funcionario se apartara de la administración de William Villamizar Laguado para apostarle otra vez a una candidatura, en 2019, empezó a tomar fuerza desde hace varios meses y ayer se materializó, luego de que hiciera pública su carta de renuncia.

En medio de un acto de rendición de cuentas en el que hizo un balance de los dos años y medio en que estuvo manejando las finanzas y los asuntos económicos del departamento, Martín Martínez anunció sus nuevos proyectos, como independiente.

En la carta de renuncia, con efectos desde el martes que acaba de pasar, el exsecretario señaló que su decisión está relacionada con motivos netamente personales y le agradeció al mandatario departamental la confianza depositada para dirigir ese despacho durante tantos meses.

Sin embargo, de tiempo atrás se sabe que son claras las aspiraciones del saliente secretario para el próximo año y así las confirmó este miércoles.

“He tomado la decisión de aspirar a la Gobernación de Norte de Santander. Quiero hacer un trabajo independiente, buscar una conciliación política, una armonía política, llegar puerta a puerta en cada municipio de Norte de Santander. Creo que es el tiempo suficiente para, con mucha responsabilidad y mucha seriedad, empezar a preparar una propuesta seria para el departamento”, sostuvo ayer el exfuncionario.

Martínez descartó, por ahora, aterrizar su proyecto nuevamente en el Partido Conservador y señaló que arranca de manera independiente, sin desconocer, eso sí, los acercamientos que tiene con otros partidos como Cambio Radical o el Liberalismo.

En las dos campañas anteriores, Martín Martínez intentó meterse en la carrera por la Gobernación de Norte de Santander con el aval del conservatismo, pero los manejos internos de la colectividad le impidieron ser el elegido.

En la primera oportunidad, un cuestionado consenso en el que resultó favorecido el exgobernador Juan Alcides Santaella, dejó a Martínez sin posibilidades de aspirar. En 2015 la historia se repitió, luego de que en una polémica encuesta, terminara avalado Juan Carlos García-Herreros.