Pese a cumplir su quinto periodo consecutivo en la Asamblea, esta será la primera vez que Francisco Bermont, presida la mesa directiva de la corporación, a nombre del Partido de la U.

Si bien se ha dicho que uno de sus próximos proyectos es llegar a la Cámara de Representantes, el dirigente, de origen liberal, tiene claro que su presente es la Asamblea y que solo el tiempo dirá cuál será el siguiente paso en su larga carrera política.

Por ahora, uno de sus primeros retos será acercar, a la corporación, a la clase parlamentaria de la región, a fin de definir acciones conjuntas con las cuales exigirle al Gobierno hechos concretos que permitan menguar la difícil situación económica por la que atraviesa Norte de Santander desde hace varios años.

En ese sentido, considera que el Ejecutivo, en cabeza del presidente Juan Manuel Santos, ha sido mezquino con la región y que hasta ahora sus promesas de campaña no se sienten en este departamento, por lo que pese a hacer parte de su mismo partido, no lo apoyaría en una eventual reelección.

Sobre estos temas, los retos de su estadía en la presidencia de la Asamblea y el panorama del departamento, La Opinión conversó con Francisco Bermont.

Esta es la primera vez que usted asume la presidencia de la Asamblea, ¿cuáles son sus expectativas para este año y de qué forma piensa lograr que el trabajo sea diferente a lo que se ha hecho hasta ahora?

El lema que tenemos para este año es una Asamblea visible, de gestiones y resultados. Visible porque queremos, desde la misma corporación, ser el epicentro de la problemática regional. Poder lograr que desde el seno de la Asamblea se establezcan todas las acciones y los procesos que permitan superar la problemática tan grave que tiene el departamento. En ese sentido, esperamos que en el salón de sesiones nos presenten acciones específicas frente a la situación vial del departamento, la situación fronteriza, el Conpes que no se ha dado, el problema del Catatumbo, el Plan de Desarrollo del Catatumbo, el gas de Norte de Santander, el páramo de Santurbán y la cuenca binacional de Catatumbo. En este último aspecto esperamos contar con el apoyo de los nuevos gobernadores del Táchira y el Zulia para así definir acciones concretas encaminadas a lograr una región binacional.

¿Qué cree que le ha faltado a la clase dirigente de Norte de Santander para acaparar la atención del Gobierno frente a las problemáticas de la región, como sí sucede en otras regiones del país?

Creo que el Gobierno Nacional ha sido mezquino con el departamento. Ha habido demasiadas promesas de campaña incumplidas: la zona especial para Cúcuta, el puerto libre, una comunicación más expedita con Venezuela que no se ha logrado; Gramalote, el plan de consolidación del Catatumbo, los más de 3 billones de pesos para vías, el plan de fronteras. El centralismo se ha venido acrecentando en el país de manera desfavorable. Hace unos días el director nacional de Desarrollo, en una conferencia dirigida a diputados, nos decía que el 65% de los recursos que le entran al país los acapara la Nación, tan solo el 15% llega a los municipios y el 10% lo tienen los departamentos. En ese sentido, se está dando un proceso de centralización que va en contra de la Constitución y que nos está agobiando. Solamente con recursos las regiones pueden lograr su propio desarrollo.

¿Qué propone como presidente de la Asamblea para no seguir en lamentos, sino, por el contrario, impulsar acciones concretas para el departamento?

Lo primero que debemos hacer en el departamento es quitarnos los egoísmos que hemos tenido en el pasado y tratar de trabajar de forma conjunta. La Asamblea y todos los diputados estamos planteando que desde la misma corporación, cada congresista presente al departamento las acciones que han hecho en sus comisiones por la región, y de esta manera definir acciones concretas, junto con el gobernador, los alcaldes y los gremios, para que sean planteadas en una sola voz ante el Ejecutivo. Tenemos que lograr que dejen de vernos como el patio trasero de la casa. Solamente con inversión, con acciones claras y precisas que permitan mejorar la situación comercial en Norte de Santander y la competitividad, podemos lograr nuestro propio desarrollo. A nosotros nos ha faltado unirnos y que el país sienta que aquí nace Colombia, exigir un mejor tratamiento.

¿En este sentido, ¿usted cree que a la clase parlamentaria lo que le ha faltado es carácter y firmeza a la hora de reclamar lo que le corresponde a Norte de Santander?

Creo que a la clase parlamentaria le ha faltado unificar criterios y establecer acciones conjuntas. Infortunadamente nosotros como nortesantandereanos no sabemos trabajar en equipo y por eso los congresistas deben unirse, pues si le va bien al departamento le va bien a ellos. Se necesita que arropen al gobernador y a los alcaldes; sacar la sangre y la garra nortesantandereana y exigir más al Gobierno Central para que podamos salir de ese enclaustramiento al que estamos sometidos.

¿Esa falta de unidad de la que usted habla obedece a que la defensa de los intereses partidistas de los congresistas siempre ha prevalecido sobre los generales?  

Sí. Cada uno de nosotros, en nuestro individualismo hemos mirado cómo sentar protagonismos particulares y no colectivos. Hay necesidad de cambiar nuestra mentalidad. Creo que este golpe que le han dado al departamento lo que nos enseña es que debemos unificar criterios, establecer hechos concretos y no listas de mercado que nos permitan lograr el desarrollo que necesita Norte de Santander.

Siendo coherente con los reparos que tiene hacía el presidente por su falta de compromiso con la región, ¿estaría dispuesto a apoyarlo en una eventual reelección, por pura disciplina de partido?

No, porque el presidente no le ha cumplido a Norte de Santander. A las zonas de frontera, específicamente a esta, no le ha ido bien con el gobierno de Santos, por ello no apoyaría una reelección suya.

El 2013 será un año político, como antesala a las elecciones de Congreso y Presidencia de la República, ¿cree que esto puede afectar el trabajo que usted ha proyectado hacer en la Asamblea?

Creo que en el tema de las campañas se puede buscar que la Asamblea sea parte del mismo proceso. Por eso, estoy invitando a la clase parlamentaria para que, a través de la corporación, podamos, con los 40 alcaldes, presentar su accionar y sus propuestas. Lo que han hecho, lo que han gestionado para Norte de Santander y con la ayuda del gobernador poder unificar criterios y exigirle al Gobierno un trato digno para los nortesantandereanos. Aspiramos que la Asamblea sea como una ventana desde donde los congresistas puedan plantear las soluciones para el departamento.

¿Qué ha pensado para hacer más visible y dinámica la corporación entre los nortesantandereanos?

Vamos a reactivar la página web de la Asamblea para permitir tener un mayor contacto entre los ciudadanos y los diputados, que sepan lo que se hace. Vamos a buscar que las comisiones, que es donde se hacen los grandes debates de la Asamblea, sean más abiertas y los nortesantandereanos conozcan el trabajo que hacemos y las discusiones importantes que damos.

¿Cómo cree que le fue al gobernador Edgar Díaz Contreras en este primer año de gobierno?

El primer año siempre es un año complejo. Pudimos plantear un Plan de Desarrollo que tuvo una muy buena calificación del orden nacional. Nos chocamos con una situación y es la falta de recursos que no solo la padecemos nosotros, sino todos los departamentos. Sin embargo, aquí es mucho más problemático puesto que la parte presupuestal va amarrada a los ingresos que no son estables como la gasolina, los vehículos, las cervezas y los licores. Basado en ello, los ingresos son muy fluctuantes y esto hace más complejo el panorama para el gobernador.