Varias veces se ha intentado resolver, como hecho histórico, el proyecto de acusación expedido por la Comisión de Acusaciones del caso del magistrado de la Corte Constitucional Jorge Pretelt, pero se ha convertido en misión imposible.

Sumando el aplazamiento de hoy, ya van cuatro intentos fallidos por los que parece que el caso se resolverá, si es que lo hace, hasta el próximo año.

En esta ocasión existieron dos razones por las cuales no se llegó a la resolución del caso. Razones que ya parecen intentos por dilatar el proceso en el cual cabe la posibilidad de que el magistrado sea declarado penalmente responsable del delito de concusión por pedir dinero para favorecer a la empresa Fidupetrol en una tutela.

La primera de ellas consiste en lo que parece la estrategia de la defensa de Pretelt. El abogado Abelardo de la Espriella había recusado a seis congresistas por haber emitido opiniones sobre el caso. Esos recursos habían hecho que la plenaria decidiera aplazar la discusión, pero se aseguraba que luego de que la Comisión de Ética los resolviera se entraría al fondo del asunto.

Sin embargo, y luego de que esta semana la Comisión de Ética diera su respuesta aceptando solo la recusación contra el representante Arturo Yepes -por haber opinado sobre la situación en la plenaria de la Cámara-, cuando parecía que todo estaba listo, aparecieron otras nueve recusaciones por la misma razón.

“Esas personas han emitido juicios contra Jorge Pretelt antes de que el expediente le llegara a sus manos, incluso algunos por las redes sociales. La norma es clarísima: nadie que emita un juicio y que va a tener bajo su control un proceso no puede pronunciarse sobre él”, dijo de la Espriella.

Es así, y considerando que por lo general los congresistas dan opiniones de todo tipo, y que la defensa del magistrado se ha tomada la tarea de buscar todas las declaraciones de los representantes, que lo más probable es que las recusaciones vayan en aumento y que se conviertan en el mejor dilatador del proceso.

¿Favores políticos?

La segunda razón parece lejana a una estrategia armada para evitar que se decida sobre el caso, pero, cabe señalar que se ha escuchado por los pasillos del Congreso de la República, que De la Espriella estaría haciendo lobby.

Antes de que se entrara a la sesión reservada, que es como se discute este tema, y luego de que se aprobara la conciliación del plebiscito con 87 votos a favor -es decir, había quórum-, todo parecía normal. Pero, una vez se empezó la discusión del tema, en un salón frente a la plenaria se empezó a repartir lechona con motivo de la Navidad. Una costumbre que tiene un representante conservador todos los años, y que casualmente hoy, volvió a repetir.

La lechona llamó la atención de los miembros de todos los partidos, pero especialmente de dos: el Conservador, y el Centro Democrático, quienes fueron las colectividades que hicieron más evidente el ausentismo, y todos representantes de las bancadas costeñas, por lo que se ha generado la duda de sí en tal acción hay una mezcla de favores políticos.

Así mismo, del Partido Centro Democrático han dicho que no van a votar si no conocen todo el expediente que está compuesto por más de ocho mil folios y del cual solo han podido leer la mitad.

Mientras tanto, el presidente de la Cámara, Alfredo Deluque, señaló que “no hemos entrado a la discusión del caso, solamente estamos votando los impedimentos y no nos alcanzan los votos suficientes para poder negar o aprobar los impedimentos que están proponiendo, de manera tal, que a la mesa directiva no le queda otra alternativa diferente sino levantar la sesión”.

El presidente aprovechó para hacer un llamado, uno parecido al que ya hizo hasta el presidente de la República, Juan Manuel Santos.

“Yo quiero hacer un llamado a todos los representantes de la Cámara para que votemos estos impedimentos de forma rápida en la próxima sesión que se agendaría con el fin de que podamos avanzar en el fondo del asunto y podamos avanzar en los términos en que la ley manda”, dijo.

Las recusaciones

En total van 15 recusaciones de representantes que han opinado sobre el caso Pretelt, dentro de las que se repiten el nombre de algunos congresistas sobre los cuales la Comisión de Ética no se quiso pronunciar porque tienen la declaración de impedimentos pendientes en la plenaria. Ellos son: Ángela María Robledo, Óscar Ospina, Rodrigo Lara y Alirio Uribe.

“Nueve congresistas recusados por temas que tienen que ver nuevamente con declaraciones o comentarios que hicieron en redes sociales que toda esta semana han venido realizando y nuevamente esta semana presentamos recusación en ese sentido”, dijo el abogado.

Entre los nuevos recusados ahora se encuentran Norbey Marulanda Muñoz, Harry González, Clara Rojas, Jorge Camilo Abril, Jack Housni Jaller y Iván Darío Agudelo.

Mientras en la plenaria de Cámara de Representantes se levantó la sesión y no se votaron otros proyectos, en la Comisión Primera de esta misma instancia también quedó pendiente la votación de la ley estatutaria de la administración de justicia.

*Bogotá | Colprensa