Satisfecha y motivada. Así se mostró la excandidata a la Gobernación de Norte de Santander por la Unión Patriótica y el Polo Democrático Alternativo, Judith Maldonado Mojica, con los resultados del domingo, en los que obtuvo 70.490 votos.

Aunque insistió en que no contaron con las garantías suficientes para el ejercicio de su derecho a elegir y bajo el señalamiento de la supuesta trashumancia se les impidió votar a miles de personas comprometidas con su candidatura, así como para el control de la votación por parte de sus  testigos electorales, dijo que los resultados obtenidos superaron las expectativas.

Maldonado reconoció que por tratarse de su primera participación en un escenario electoral, estaba convencida de que si hacían un trabajo excelente y lograban calar el mensaje entre las comunidades, alcanzarían a sumar, al menos, 50.000 votos.

En ese sentido, ante la respuesta obtenida, la defensora de derechos humanos anunció que el proyecto que surgió meses atrás por mandato popular, seguirá adelante y que, incluso, no descartan apostarle a unas nuevas elecciones de Congreso.

“Hemos recibido el más grande acto de amor, de conciencia y de dignidad de los nortesantandereanos. A todo Norte de Santander le manifestamos nuestro compromiso de seguir defendiendo, protegiendo y cuidando nuestro departamento y ciudades”, dijo Maldonado.

Contó que desde este mismo fin de semana, el equipo de trabajo que la acompañó en la campaña, así como los partidos políticos y candidatos con los que hizo alianza, entrarán en un amplio proceso de evaluación y balance de lo que ha sido el ejercicio de la actual contienda y que el 30 de noviembre podría haber una decisión contundente, frente a una nueva apuesta electoral.

“Tenemos claro desde el principio que la esperanza y el poder popular no terminaría el 25 de octubre. Que se haga lo que el pueblo mandate; que se haga la voluntad del pueblo, si este quiere que continuemos transformando la forma tradicional y corrupta de hacer política”, expresó la excandidata.

Maldonado no se aventuró a anticipar si le apostaría a una Cámara o un Senado, por cuanto insistió en que la decisión no será de ella sino de ese mismo pueblo que meses atrás impulsó su aspiración a la Gobernación.

Lo que sí dijo es que desde ya comenzará a hacer un proceso de veeduría de los nuevos mandatarios, sus programas de gobierno y planes de desarrollo.