La disputa que existía entre los diputados liberales Frank García y Rafael Cáceres por la presidencia de la Asamblea para 2017 quedó zanjada a favor de este último, quien será elegido el próximo 9 de noviembre.

Si bien, los dos dirigentes habían presentado una proposición para que la elección se programara para ayer y de esta forma pudieran tener tiempo para trabajar en un acuerdo que permitiera llegar con una sola candidatura, esta finalmente no fue convocada.

Según trascendió, aunque García y Cáceres insistían en mantener sus aspiraciones y contaban con al menos cinco respaldos cada uno, la dirigencia del partido consideró que era pertinente mantener la unidad tanto de la colectividad como de la Asamblea frente a esta elección.

Así las cosas, se estableció que el candidato a dirigir las riendas de la Asamblea durante el próximo año, sería en esta oportunidad el exalcalde de Los Patios, quien cumple su primer periodo en la corporación.

Según los acuerdos políticos suscritos entre los diputados, el turno de presidir la mesa directiva el próximo año le corresponde al liberalismo, de ahí que García puso a sonar su nombre y empezó a hacer lobby para conseguir el respaldo de sus compañeros.

Sin embargo, días después, su compañero de bancada comenzó a moverse en el mismo terreno, lo que provocó una división de fuerzas en la Asamblea.

Sin embargo, como ha sido habitual en las últimas elecciones de mesa, la escogencia de las directivas se da por unanimidad, de ahí el afán del Partido Liberal por lograr un consenso que permitiera una votación en bloque.

A mediados de este año, la tolda roja experimentó una situación similar frente a la escogencia del candidato a presidir la Cámara de Representantes, pues si bien el santandereano Miguel Ángel Pinto fue el ungido por la mayoría  de la bancada para postularse, el nortesantandereano Alejandro Carlos Chacón también decidió presentar su nombre, lo que obligó a hacer un acuerdo para compartir periodo y evitar la división de la colectividad.