Después de entregar el balance de su gestión como vicepresidente de la República, cargo que ejerció durante casi tres años, Germán Vargas Lleras radicó su carta de renuncia ante el Congreso, la cual espera hacer efectiva desde el 21 de marzo, si esa corporación se lo permite.

“Teniendo en cuenta lo expuesto, y habiendo terminado este ciclo de realizaciones, presento mi renuncia irrevocable al cargo de vicepresidente de la República, la cual solicitó que se haga efectiva a partir del 21 de marzo de 2017. Es importante señalar al honorable Senado de la República, que la presente renuncia irrevocable corresponde a mi voluntad libre, espontánea e inequívoca de separarme definitivamente del cargo que ejerzo a la fecha”, manifiesta Vargas Lleras en la misiva.

El funcionario recordó que cuando decidió acompañar al presidente Juan Manuel Santos como vicepresidente no había inhabilidad para participar en contiendas electorales, pero que recientemente se incluyó una en la Reforma al Equilibrio de Poderes, y por ello, prefiere retirarse para evitar inconvenientes en sus planes futuros.

“Si bien, a la fecha, no he definido mi participación en el próximo proceso electoral, ante la posibilidad de hacerlo y con el fin de evitar que me cobije esta inhabilidad, he decidido retirarme del cargo manteniendo mi compromiso de continuar trabajando desde otros escenarios por el desarrollo del país”, agrega.

Por su parte, el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, aseguró que la dimisión se hará efectiva el martes, toda vez que tienen tres días para convocar y en vista de que el fin de semana es puente festivo, es difícil reunir a los congresistas.

“Es mejor, para garantizar el éxito de la aceptación de esta renuncia, hacerlo el próximo martes”, dijo.

El Senado tiene tres días para aprobar la carta y luego de hacerlo se convocará al Congreso en pleno para elegir al nuevo vicepresidente, que sería el general en retiro Óscar Naranjo, quien tiene el apoyo de las mayorías.