La Opinión consultó a varios excandidatos a la Alcaldía de Cúcuta y a  la Gobernación de Norte Santander, así como a un politólogo sobre los resultados de las elecciones del domingo 25 de octubre.

Respondieron:

Rafael Romero, de la Unión Patriótica

Como hace 2015 años, el pueblo eligió. No obstante, es una demostración que Cúcuta aún no está preparada para gobiernos realmente alternativos y tiene un gran temor al cambio. Se optó por la célebre frase  “más vale malo conocido, que bueno por conocer”.

Gana, sin duda alguna, el pragmatismo del elector en optar por el viejo adagio: “No importa que robe, pero que haga obras”. Gana la desesperanza de los excluidos que prefieren la cultura de la mendicidad que los retos del verdadero desarrollo. Pierde toda la ciudad.

En el caso de la UP, quedó demostrado, según este mismo diario, que hice las propuestas más serias a tal punto que mis contendores así lo reconocieron y ello me lleva a suponer que el alcalde electo deberá sumar a su plan de gobierno todas las propuestas que contribuyan al progreso de la ciudad, en un obligado ejercicio de paz y reconciliación en la era del posconflicto. No es un favor, es su deber, que no implica la genuflexión del movimiento alternativo. En medio de la ebriedad del triunfo, es bueno que no alucine con escenarios de confrontación innecesaria. Habrá que ver si valió la pena que, distinto a hace 2015 años, el pueblo no se equivocó al elegirlo.

Charles Torres, del Polo Democrático

Sin duda, la democracia triunfó nuevamente. Esta vez de manera reiterativa los nortesantandereanos confiaron en el doctor William Villamizar, en referencia de la  buena gestión y  alcances de su primer período de administración departamental. A él  es  a quien siempre he manifestado mi  profunda  admiración, en mi calidad de nortesantandereano. Confío plenamente en su  gestión y logros en base de un plan estratégico de Gobierno donde hay apuestas al fortalecimiento de la productividad y competitividad de la región, siendo ejes fundamentales la infraestructura, la educación, los servicios sociales, la  generación de ingresos y la convivencia, temas de intervención inmediata en nuestro departamento.

También considero que la elección del doctor César Rojas Ayala es un gran salto al regreso de los tiempos del desarrollo para nuestra capital. Los cucuteños confiaron en el nombre  del doctor Rojas, en comunión del recordado  doctor Ramiro Suárez,  quien marcó el mejor recuerdo de gestión municipal en la mente y corazón de los cucuteños.

Así también, comparto que los ejes fundamentales de acción para nuestra ciudad son el turismo, el sector industrial, empleos para madres cabeza de familia y fortalecimiento familias en acción, así como  es importante incluir  la juventud también como protagonista de este proyecto, gestionando oportunidades de educación, deporte y empleo.

Jairo Cristo, de más educación

El grupo Más Educacion y su candidato a la Alcaldía por el partido de la Alianza Social Independiente,  Jairo Cristo, analiza el resultado de las elecciones del 25 de octubre del 2015 concluyendo que se hace urgente concientizar aun más a nuestras comunidades de la importancia de educarnos para transformar nuestra realidad social.  

Para nosotros, nuestro ejercicio fue muy positivo porque sabemos que los grandes cambios no ocurren de la noche a la mañana, pero ya son más los que se suman a este gran sueño de ver nuestra sociedad más educada, segura e incluyente; lamentablemente, pudimos apreciar que aun en nuestras comunidades prima la necesidad de vender el voto y que de esas situaciones se aprovechan algunos candidatos para salir victoriosos, pero estamos seguros que esto tiene que cambiar y que solo a través de la educación mejoramos nuestra calidad de vida, aunque quedó demostrado que es más fácil engañar a la gente con dinero, que educarla para construir ciudad.

A un mal gobernante le interesa un pueblo ignorante pues esto lo hace susceptible de abusos y engaños, para nosotros que somos “más educación” nos interesa transformar al ser humano a través de competencias que le permitan el poder de crecer, pensar y decidir con inteligencia y con decisión. Seguimos en pie de lucha y estamos seguros que los buenos somos más.

Judith Maldonado, UP-Polo

Lamentamos profundamente que quienes finalmente serán los perdedores de estas elecciones: el departamento y la ciudad de Cucuta entre otras. Lo son porque triunfaron nuevamente las maquinarias que representan la corrupción y la criminalidad. Sabemos que mucho dinero invirtieron para presionar y comprar conciencias.

Creo que deben estar preocupados y molestos, ya que ni los años que llevan controlando y malgobernando, ni la cantidad de gente que vincularon a sus maquinarias ni la cantidad de dinero invertido se compadece con los resultados obtenidos.

Al contrario esta candidatura celebra cada uno de los más de 100.000 votos obtenidos a favor de las nuevas formas de hacer política, porque son votos de amor, de dignidad y de conciencia.

Lamentamos profundamente no haber contado con las mínimas garantías electorales, ya que nos invalidaron miles de cédulas por supuesta trashumancia e impidieron y negaron la acreditación y acceso de nuestros testigos electorales para verificar los verdaderos resutados electorales, y fuimos objeto de persecución política  el día de elecciones.

Muchas gracias a las personas que creyeron en la esperanza, y ese maravilloso equipo de campaña que nos acompañó de manera convencida y comprometida, ¡Por amor al pueblo la esperanza llegó para quedarse!

Mila Patricia Romero, del Centro Democrático

Un enorme sentimiento de gratitud es el que nos embarga hoy, primero con Dios y las personas que desinteresadamente se unieron a nosotros, al equipo base, a los candidatos a alcaldías, concejos, Asamblea y ediles que durante este tiempo estuvieron en la tarea de salir a llevar nuestro mensaje transparente y honesto; a los medios de comunicación, a los críticos que nos hicieron trabajar más duro para demostrarles que no estábamos solos.

Gracias a los más de 78.000 nortesantandereanos que depositaron su voto de confianza, por la esperanza de ver un Norte seguro y productivo. El Centro Democrático sigue trabajando. Nuestra votación aumentó un 34 por ciento en comparación con las anteriores elecciones.

Logramos representación en la Asamblea con casi 46.000 votos en total y en el Concejo de Cúcuta, con más de 16.000. Dos importantes alcaldías en Pamplona y Arboledas y dos más en fuertes alianzas. Nuestro partido seguirá en construcción, fortaleciéndose para promover los principios que el ex presidente y senador Álvaro Uribe ha sembrado e inculcado amor por la patria, trabajo noble, fuerte y desinteresado por ella. Mil gracias por su apoyo bravos hijos del Norte. ¡Seguimos adelante!

Fabio Torres, politólogo

Los resultados electorales del pasado domingo muestran un debilitamiento creciente de lo que tradicionalmente se conoce como “maquinaria política”, representada en Cúcuta en el Partido Liberal que ante su incapacidad de cohesión interna y la actitud de ataque, amparado en el alto poder político, equivocan en la estrategia electoral; en el departamento.

El Partido Conservador que nuevamente pierde la Gobernación de Norte de Santander y disminuye su participación en la Asamblea y actúa con cero coherencia política en la alianza por la Alcaldía de Cúcuta. Otro frente de análisis se ubica en la agenda de gobierno que se ejecutará durante los cuatro siguientes años donde para el caso de la Gobernación se concentra en la regionalización del posconflicto que no solo incluye Catatumbo sino que también deberá considerar el Área Metropolitana de Cúcuta y frontera y el Sarare como escenarios de confrontación donde se requiere presencia del Estado.

Para el caso de Cúcuta es evidente un gobierno de corte autoritario de aceptación social popular claramente dirigido desde la cárcel con ataque directo contra el control social y el diálogo interinstitucional, con fuertes inversiones concentradas en la infraestructura sin que ellas respondan a un proceso claro de planeación o sean las prioridades para un modelo de desarrollo de largo plazo de ciudad, lo serán en razón a que ellas representan rentabilidades altas con las cuales recuperar inversiones de campaña en la lógica de una Alcaldía municipal como una entidad con ánimo de lucro y que en todo caso estarán controladas por funcionarios de fuera de la ciudad. Un tercer punto de análisis lo representa la pobreza del debate durante la época electoral donde las propuestas de ciudad fueron tímidas o inexistentes que dejó una alta abstención y una reducción en las opciones para los indecisos que ante la fuerza económica del candidato ganador el día electoral terminan por inclinar la decisión final.