A pesar de que la zona veredal de Caño Indio fue una de las últimas en definirse y por ende es hoy una de las más atrasadas en la adecuación de los campamentos, las condiciones de salud y organización de los integrantes del frente 33 de las Farc que permanecen concentrados allí es óptima.

Así lo destacó Maribel Trujillo, directora de la ESE Regional Norte, de Tibú, quien estuvo días atrás en el sitio con una brigada de salud que ofreció el Ministerio de Salud y Protección Social y  en la que se revisó el estado de los guerrilleros en proceso de desmovilización, así como sus posibles riesgos sanitarios.

De acuerdo con la funcionaria, 282 personas fueron atendidas en el sitio por especialistas en odontología, medicina general, sicología, trabajo social, entre otros.

De la misma forma, se tomaron muestras de citología, exámenes de laboratorio clínico y se impartieron capacitaciones en planificación familiar y vectores.

Trujillo dijo que las jornadas se extendieron durante tres días, tiempo en el cual se adelantaron, además, fumigaciones, vacunaciones y se tomaron muestras del agua que abastece el lugar, para comprobar su calidad.

La directora de la ESE destacó que, a diferencia de otras zonas veredales en las que se han presentado problemas de salud, la presencia en el lugar resultó ser complementaria porque el estado de los guerrilleros es muy bueno.

“Es una población sana. En salud oral están bien; bien en planificación, apenas dos embarazadas, cuatro niños menores de cuatro años, una lactante, algunos hipertensos y otros con diabetes, pero como tal de salud están  muy sanos. Son muy organizados”, dijo Trujillo.

Manifestó que la guerrilla  informó que cuentan con personal capacitado y por eso tienen un amplio dominio en lo que a enfermedades tropicales, manejo de las basuras y organización para vivir a la intemperie, se refiere.

El próximo 16 de marzo habrá una nueva visita a la zona por parte de diferentes dependencias de la Gobernación, pero esta vez la atención no será para la guerrilla sino para las comunidades aledañas al punto de concentración. Lo anterior como una forma de generar confianza en el proceso de implementación del acuerdo de paz.